Navas, presente en la semirremontada de España en Costa Rica
Tres jugadores sevillistas tenían partido este martes con sus selecciones nacionales. Por un lado, Jesús Navas, que viajó hasta Costa Rica con España para disputar un amistoso; por otro, el croata Ivan Rakitic y el bosnio Emir Spahic, que tenían encuentros de la repesca para la Eurocopa 2012. Rakitic estará en la cita de Polonia y Ucrania, pero no Spahic.
Jesús Navas no salió de inicio pero Vicente del Bosque le introdujo en el campo tras el descanso, sustituyendo a Mata, para disputar la segunda mitad de un partido que la Selección Española perdía por 2-0. El extremo del Sevilla no tuvo demasiada participación, aunque metió un buen centro sin rematador y provocó una falta que Sergio Ramos estuvo a punto de convertir en gol. No obstante, en un partido cerrado para España en el que los costarricenses se pusieron a defender una vez por delante en el marcador, se vio clara la intención del seleccionador español de utilizar a Navas como revulsivo desde la banda derecha, por donde el combinado nacional genera poco peligro. Al final, semirremontada y 2-2 en el marcador.
En los partidos oficiales de la repesca para la Eurocopa 2012, Rakitic fue el primero en jugar y celebrar con su equipo el pase al torneo. El resultado de la ida era favorable para los croatas: 0-3 en Turquía. Rakitic jugó todo el partido y lo intentó varias veces, hasta con cinco disparos, de los cuales dos pusieron en aprietos al portero turco, Bolat: uno, un tiro desde la frontal del área que rechazó en un defensa; otro, tras un buen cambio de ritmo y una pared con un compañero.
Peor suerte corrió la selección bosnia, que visitaba el Estadio Da Luz con la intención de hacer valer el empate sin goles de la ida. Difícil misión ante un equipo como Portugal, que cuenta en sus filas con artillería pesada de la talla de Cristiano Ronaldo, Nani o Helder Postiga. El sevillista Spahic, capitán bosnio, disputó los noventa minutos, vio una tarjeta amarilla e, incluso, marcó un gol, el 3-2, que aún daba esperanzas a su equipo. Al final, los bosnios cayeron estrepitosamente, 6-2.