Rubén monta una fiesta por su centenario

El Real Betis ha sumado ante el Rayo Vallecano la tercera victoria de la temporada. Gran parte de culpa la ha tenido Rubén Castro, que con un gol y una asistencia ha resuelto el choque del lado verdiblanco. Para el canario, el de Vallecas ha sido un partido especial. No precisamente por haber vencido por primera vez como bético a su exequipo, sino porque ha celebrado su partido número 100 con el Betis en Primera división de la mejor manera, viendo puerta, dando un gol y consiguiendo los tres puntos.

Todavía podía haberlo hecho mejor. Con 0-2 en el marcador, Joaquín dejaba tumbado a Toño y su manso disparo golpeaba en el palo ante la atónita mirada de Rubén Castro, que no quería interferir en la jugada para que el gol se sumase a la cuenta del portuense. Raro en Rubén, pero todos le habríamos aplaudido de haber acabado en el fondo de las mallas el disparo de Joaquín. Antes, en la primera parte, el esférico le llegaba a un Rubén Castro caído a banda derecha. Lo recibía de Westermann y se lo devolvía al central alemán para que definiera a las mil maravillas y adelantase al Betis en el marcador.
En la segunda mitad, tras unos primeros minutos de dudas en los que parecía que el Rayo se hacía con el control, volvía a aparecer Rubén Castro para disipar toda duda posible. Una internada de Cejudo en el área acababa con la asistencia de este al ariete grancanario, que de primeras batía por su lado derecho al guardameta rayista. No hay mejor forma de celebrar un centenario en la máxima categoría que como lo ha hecho Rubén.
El ariete cumple su quinta campaña en el Betis, tercera en Primera. Así, en la campaña 2011-12, Rubén Castro vio puerta en 16 ocasiones; al año siguiente, el canario marcó 18 tantos en 34 partidos, los mismos que disputó el curso anterior. La campaña del drástico descenso a Segunda, anotó 10 goles en 25 partidos. Causó baja durante buena parte del campeonato, algo que influyó negativamente en el rendimiento del equipo, pues desde su llegada a Heliópolis es el máximo referente ofensivo del equipo.
Rubén Castro es uno de los tres jugadores, junto a Adán y Bruno, que ha disputado los 630 minutos que el Betis ha jugado hasta el momento. En lo que va de temporada, ha participado en todos los goles del equipo a excepción del de Petros ante el RC Deportivo. No obstante, sí que participó en la jugada ya que conectó con Dani Ceballos en banda izquierda antes de que este sirviera el balón al centrocampista brasileño para que empatase la contienda.
100 partidos en la máxima categoría y 33 de ellos se han resuelto con victoria a favor del Betis. Gran parte de culpa de que esto sea así la tiene el propio delantero, que con sus goles, un total de 119, ostenta el título honorífico de máximo goleador de la historia de la entidad. Así las cosas, Rubén Castro sigue engordando su leyenda con el escudo de las 13 barras en el pecho. Llegó a la capital hispalense con 29 y ahora, con 34, es leyenda viva del club. Está hecho un chaval, cualquiera diría que esa es su edad. Aun queda Rubén para rato.