Sanabria y Hernán Pérez, las bazas paraguayas de Poyet y Quique
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Sanabria y la posición de Rubén Castro
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Sanabria: "Tengo la responsabilidad de dar lo máximo para el equipo"
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Hernán Pérez también es duda para enfrentarse al Betis
Arnaldo Antonio 'Tonny Sanabria ha sido la principal apuesta y petición expresa en ataque de Poyet en su estreno como entrenador en España y, por ello, pagó por la mitad de su pase a la Roma una cifra superior a los siete millones de euros tras la exitosa cesión que tuvo la pasada temporada en el Sporting de Gijón: "No tengo presión por lo que pagaron por mí. Sí la responsabilidad de intentar hacer siempre el máximo", afirmó ayer el '9' bético, que sólo ha jugado tres partidos esta temporada por una lesión en el pubis y al que Poyet le dio la titularidad la pasada jornada ante Osasuna en detrimento de Rubén Castro.
Ahora, el técnico uruguayo, según dijo esta semana, sopesa alinearlos juntos ante el Espanyol, equipo ante el que el punta de San Lorenzo pretende estrenarse ante el gol porque los delanteros viven de él y, según dijo, si no los hacen no son "nadie".
El atacante bético se verá las caras con su compatriota Hernán Pérez (1989), quien esta año afronta su segunda temporada en el Espanyol tras llegar procedente del Villarreal, y que está entre algodones y se ha entrenado de forma individualizada por una sobrecarga en el aductor derecho que le impidió participar en la Supercopa de Catalunya. Pérez llegó a Cornellà-El Prat la pasada temporada tras una cesión de un año en el Valladolid y pronto convenció a los técnicos pericos, Sergio González y Galca, y disputó 32 partidos de Liga, uno de Copa del Rey y marcó siete goles; mientras que esta temporada lleva dos en los nueve encuentros que ha disputado, seis de ellos como titular.
El extremo es el último eslabón de una tradición paraguaya en el Espanyol con jugadores como Miguel Ángel Giménez, Ortiz Aquino o Cayetano Re, quien también entrenó fugazmente al Betis (1988-89). Sus inicios muy humildes forjaron su carácter, ya que su familia vivía en una cabaña de madera, no tenía dinero para pagar el desplazamiento a los entrenamientos y pedía las botas a sus compañeros: sus numerosos tatuajes le recuerdan esta dureza.
Hernán Pérez debutó en la máxima categoría de Paraguay a los 16 años y, con 20, dio el salto a Europa y firmó por el Villarreal, impresionado por su rendimiento en el Sudamericano Sub-20. En la 2013-14 se fue cedido en el mercado de invierno al Olympiacos griego y en el mismo periodo de fichajes de la 2014-15, al Valladolid, desde donde recaló en el Espanyol tras adquirir el cien por cien de los derechos federativos del futbolista.