Quique Setién, lo que pudo ser y no fue
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La UD Las Palmas aterriza en Heliópolis con la incertidumbre de que Real Betis se encontrará. La salida de Gustavo Poyet y la consiguiente entrada en el banquillo de Víctor Sánchez del Amo reabre el ramillete de posibilidades a toda la plantilla. En una situación más tranquila está la escuadra insular. Con 16 puntos en su haber en la novena plaza, buena parte de los éxitos canarios radica en la figura de Quique Setién. El técnico cántabro fue un viejo anhelo de la directiva verdiblanca. Se intentó su fichaje en hasta dos ocasiones.
El juego que procesan los equipo de Setién no pasa desapercibido por el mundo del fútbol. En su etapa al frente del CD Lugo llamó la atención en una categoría tan tosca y poco vistosa como la Segunda División. Ya en la élite, destacó y sigue haciéndolo en Gran Canarias. Dirige un equipo con las ideas claras y con un patrón de actuación inalterable independientemente del rival que tenga enfrente.
En la temporada 2014/2015, Julio Velázquez tomó las riendas del club tras el batacazo que supuso bajar a Segunda con 25 puntos un año antes. Setién destacó en Lugo y el Betis intentó su contratación. El propio técnico lo reconocía recientemente: "Cuando estaba en el Lugo, estaban muy avanzadas las negociaciones pero fue el Betis el que decidió contratar a otro entrenador. Hablamos de muchas cosas y yo cambié mucha información con el director deportivo, pero al final no fructificó", señaló en los micrófonos de Canal Sur Radio el pasado mes de septiembre.
Por si fuera poco, y ya con Miguel Torrecilla en la dirección deportiva, hubo otro acercamiento bético hacia su persona: "No hubo ninguna posibilidad este verano. Recibí una llamada de Torrecilla en su momento pero no tenía nada arreglado aún con Las Palmas y que hasta que no terminase de hablar con Las Palmas no iniciaría una negociación con otro equipo. Al final me arreglé con Las Palmas y llamé inmediatamente a Miguel Torrecilla para comunicárselo y agradecerle el interés. Ni se habló de cantidades ni de años. No se negoció nada. Torrecilla me dijo que me le hubiese gustado que formara parte del Betis pero le comenté la situación que había".
Don intentonas y un mismo desenlace. Quique Setién se sentará una vez más en el Benito Villamarín, pero en el banquillo visitante.
No hay dos sin tres y seguro que algún día Quique se siente en el banquillo local del Betis por que a el le gusta la idea, pero es un caballero de los que no hay y respeta a su club.