La noche y el día un derbi después

Los béticos cuentan los días para que llegue el derbi y no puede decirse que hayan hecho esto muchas veces en los últimos años. Pero esta vez sí. El Betis ha llegado al final de temporada con la moral por las nubes, en Europa y tras una gran racha de resultados, que no se empaña con la derrota en San Mamés. Una situación muy diferente a la que llegó al derbi de la primera vuelta, donde las sensaciones no eran tan buenas.

Pero el equipo de Quique Setién llegó al Sánchez-Pizjuán, ganó el derbi y, aunque con algún traspié, cogió una velocidad de crucero hasta sumar los 59 puntos actuales. Un Betis muy diferente al del pasado, al que llegaba a otros derbis, aunque este sábado ante su gente intentará romper la maldición como local, ya que lleva 12 años sin ganar en Heliópolis al Sevilla.
Setién cambió el sistema y la llegada de Marc Bartra, a pesar de la grave lesión de Feddal, ha contribuido a fortalecer el sistema defensivo, a encajar muy pocos goles y a ganar casi siempre. Porque arriba hay mucha pólvora y cualquiera pueda hacer un gol. De hecho, sólo Barragán, Rafa Navarro, Amat y el propio Bartra no han visto puerta esta temporada.
El Betis, eso sí, estará pendiente del Sevilla-Real Madrid para saber si jugará directamente la fase de grupos de la Liga Europa o si aún tendrá que asegurarla, bien ante el Sevilla o en la última jornada en Butarque. Además, según ese resultado en Nervión, el Betis tendrá en su mano complicar la clasificación europea al eterno rival.