La semana fantástica del Betis
El Betis ha resuelto en apenas cuatro días de un plumazo dos deudas que tenía pendiente en los últimos tiempos. Si el miércoles se metía en unas semifinales de Copa del Rey catorce años después, este domingo ha vencido al Atlético de Madrid en Heliópolis gracias a un gol de penalti de Canales y ponía fin así a trece años sin hacerlo. La semana fantástica en verdiblanco.
Los de Setién han dado dos grandes alegrías a su afición, que así se lo reconoció antes, durante y después del partido. El Villamarín vibró con los suyos y vive un estado de ilusión extraordinario. Esta vez, a su habitual estilo de juego, el equipo añadió una gran intensidad y esfuerzo defensivo en el tramo final del encuentro para guardar el 1-0, que llegó con el gol del penalti de Canales.
Después de una primera parte en la que se vivió una calma chicha, las hostilidades se desataron en la segunda mitad. En ese momento llegó el gol de Canales, espectacular su partido una vez más como líder del equipo. Luego, ante el empuje de un Atlético insistente,ha demostrado que este equipo también sabe defender cuando toca y ser competitivo.
Setién apostó por rotar más de medio equipo, concretamente seis jugadores respecto a los titulares del miércoles en la Copa del Rey. Llamó la atención la presencia en la medular de Kaptoum y arriba la titularidad de Sergio León. El gol contra el Espanyol y la salida de Sanabria abre un nuevo horizonte al de Palma del Río en el segundo tramo de la temporada. Aunque descansaron algunos como Sidnei, Lo Celso y Loren, otros como Mandi, Bartra o Canales sí actuaron desde el principio.
El partido comenzó con emociones fuertes. Para empezar un cabezazo de Feddal hizo sacar lo mejor de sí a Oblak. Evitó el gol enen la escuadra. Una parada sólo al alcance de los mejores del mundo. Ese arranque fue sólo un espejismo. El resto de la primera mitad fue menos intensa que eso y apenas se registraron ocasiones. Sólo un par de llegadas colchoneras, como la que acabó con remate del debutante Morata (12’).
Contrariamente a lo que ocurre en la mayoría de los partidos del Betis, la posesión estuvo discutida e incluso en muchas fases el Atlético encadenó largas jugadas. Eso sí, los porteros apenas participan. En el cuadro verdiblanco el más activo fue Canales, omnipresente en ataque y defensa. De sus botas nacieron las acciones con más sentido del cuadro bético.
Loable fue también en el primer acto la concentración de Feddal y Bartra, quienes abortaron ocasiones antes de que llegaran los remates del Atlético. Los heliopolitanos apenas llegaron a los dominios de Oblak y Sergio León, con las ganas de siempre, casi no pisaba zonas de peligro. Guardado y Kaptoum, que alternó acciones interesantes con alguna pérdida, libraban un dura batalla con el poblado mediocampo de los de Simeone.
Segunda parte
Al poco de comenzar la segunda mitad, Setién dio descanso a Bartra al que sustituyó por Sidnei. La Copa aparece en el horizonte bético. El inicio de segundo acto arrancó con una clara ocasión de Griezmann que envió fuera una clara ocasión. Todo había comenzado con una pérdida de Francis, que se había mostrado muy seguro hasta entonces.
El Atlético avisó por segunda vez, pero Feddal estuvo providencial para arrebatar el disparo final de Morata (54'). El partido se animaba y Canales, en una acción personal, respondía con un disparo (57'). Sergio León también la tuvo, pero no conectó el remate tras una gran jugada de Kaptoum (59').
Claro que la alegría iba a ser mayor en el 65'. Un centro de Guardado fue tocado con la mano por Filipe Luis y el colegiado decretó penalti. Unos instantes de suspense en el estadio y Canales anotaba la pena máxima. El Villamarín explotaba. Las acciones se sucedían y poco después Griezmann estrellaba un balón en el palo (66').
El gol hizo que el Atlético diera un paso adelante y merodeara con más intensidad el área de Pau López. Una de los detalles de ese momento fue el regreso a los terrenos de juego de Junior, mes y medio después (72'). El Betis también encontraba espacios en alguna contra. Una de ellas acabó con remate de Guardado (76').
En esa fase del choque emergió, más si cabe, Canales. Dormía la pelota como nadie y daba aire a la salida de balón del equipo. El Atlético lo seguía intentado y Vitolo obligó a esforzarse a Pau López (81'). El Betis se defendía con uñas y dientes. Lo ejemplificaba Junior con un par de cortes cruciales en centros cruzados del Atlético. El esfuerzo defensivo y el empuje de la grada hicieron que el marcador ya no se moviera.
