El balón parado y los centros laterales, dos espinas para el Valencia de Gattuso: "Es culpa mía"
Como le pasó a sus predecesores, las faltas laterales y las jugadas a balón parado, martirizan al Valencia CF de esta temporada.
El Rayo Vallecano puso fin a nueve meses sin ganar en su estadio en LaLiga Santander, desde el 18 de diciembre de 2021, superando al Valencia (2-1), al que venció con un gol de Isi Palazón en la primera parte y otro de Nico González en propia puerta en la segunda. El primer tanto, a balón parado como el segundo, machacaron a un Valencia que achacó una falta de concentración Cuando un equipo recibe dos goles a balón parado, y juegas sin intensidad no merece ganar. La culpa es mía", reconocía Gattuso al finalizar el partido.
El equipo madrileño saltó al césped con una marcha más que su rival y dispuesto a ejercer una presión que dificultara la salida de balón del Valencia, una circunstancia que hizo sufrir mucho a los hombres de Gennaro Gattuso, entre ellos José Luis Gayá, que, tras cumplir cuatro partidos de sanción, debutó en el campeonato como titular por el lateral izquierdo.
A los cuatro minutos, en una falta escorada a la izquierda, el argentino Oscar Trejo puso un centro medido raso que recogió al filo del área pequeña Isi Palazón, adelantándose a Hugo Duro, para mandar con un zurdazo el balón al fondo de las mallas.
Esa inoperancia del Valencia a nivel defensivo volvió a quedar patente poco después, a los 14 minutos, cuando Alejandro Catena recuperó un balón en la línea de tres cuartos, cambió a su izquierda para Trejo y el argentino, tras recortar a su defensor, falló en el mano a mano con Mamardashvhilli, que volvió a salvar a su equipo en la siguiente jugada, en el rechace a un potente disparo de Álvaro García que también despejó.
Esa no sería la única vez que el portero georgiano tuvo que emplearse a fondo para sostener al Valencia, puesto que mediada la primera mitad realizó una gran estirada para despejar a córner un disparo de Sergio Camello que buscaba la escuadra.
Al Valencia le costó mucho encontrar el ritmo del partido, irreconocible en su imagen respecto a la pasada jornada, cuando arrolló al Getafe. En Vallecas, cuando empezó a sentirse a gusto fue al final de la primera parte y en esos instantes pudo empatar justo antes del descanso con una volea de Hugo Duro que se fue rozando el larguero.
El descanso pareció sentarle bien al equipo de Gattuso y nada más salir de los vestuarios trenzó una buena jugada por la derecha que terminó con un centro de Musah al corazón del área que Nico mandó por encima del travesaño.
Justo después el Rayo marcó el segundo. Fue tras un córner por el lado derecho que botó Isi Palazón y que, tras un leve toque de Oscar Trejo, llegó a Nico, que, en su intentó de despejar, mandó el balón al fondo de su portería con la pierna izquierda.
El segundo gol, a balón parado pero en propia puerta
Ese segundo gol dejó muy tocado al Valencia, que no supo reaccionar para poner en aprietos al Rayo, pese a los intentos de Gattuso de dar otro aire a su ataque con la entrada de Justin Kluivert y Marcos André, que, aunque voluntariosos, se mostraron desasistidos.
El que más lo intentó fue Lino, que realizó un par de acciones individuales que terminaron en sendas paradas de Dimitrievski, muy atento durante todo el partido para ser un jugador más en la táctica de posesión de su equipo.
El Valencia recortó distancias en el tiempo añadido con un gol del francés Mouctar Diakhaby de cabeza, tras una falta centrada desde la izquierda, que llevó el nerviosismo a la grada de Vallecas, que vio como su equipo terminó metido en su área defendiendo con todos sus jugadores.
Con la victoria, el Rayo se sitúa en mitad de tabla con siete puntos, uno más que el Valencia, que lleva seis en cinco jornadas.
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