¿Realmente es necesario presentar a Borja?
El Real Valladolid de Luis César Sampedro ya tiene a su quinto fichaje. Tras Sulayman Marreh, Borja Fernández Fernández (Orense, 14-01-1981) llega al centro del campo blanquivioleta en la que será la tercera etapa del canterano del Real Madrid en el Nuevo Estadio José Zorrilla. El ex de la Unión Deportiva Almería, el Real Club Deportivo Mallorca o el Getafe CF regresa a Valladolid en una sorprendente operación que Miguel Ángel Gómez no escondía durante la semana. Así, el director deportivo blanquivioleta cierra un nuevo fichaje de corto plazo pero con una amplia experiencia en la categoría. Borja posee una carrera que no hace falta presentación, y mucho menos en el mundo pucelano.
Así, conociendo Borja dónde llega y el entorno blanquivioleta quién es Borja... ¿Es realmente necesario contar quién es este gallego de 36 años? Rotundamente, no. Su perfil, su historia y sus antecedentes son muy conocidos en Valladolid. Ya lo eran el 25 de enero de 2016 cuando firmaba su regreso. Entonces, su presentación demandó lectura, información y curiosidad. Una de las piezas más leídas de la historia de ElDesmarque Valladolid sólo ha vivido una pequeña transformación en los últimos 13 meses.
Rechazado por Paco Herrera hace ahora poco más de un año, el experimentado centrocampista se marchó a la India para vivir su última exótica experiencia antes de regresar a LaLiga 1|2|3 y ser un jugador franquicia en el juego de la Unión Deportiva Almería. Llegado con el equipo en una situación agónica, el nuevo jugador del Real Valladolid colaboraba activamente para que los rojiblancos permanecieran un año más en la categoría. Su experiencia, ese buen papel en el Estadio de los Juegos Mediterráneos y sus ganas por seguir en el mundo del fútbol han cerrado su incorporación al Pucela en una llegada que no necesita presentación.
Dura etapa
Cuando en enero de 2016 Borja regresaba a Valladolid lo hacía sin una dilatada experiencia en Segunda División. Apenas dos años en la categoría de plata del fútbol español que habían deparado dos de los mayores éxitos de su carrera. Tanto en el Real Valladolid 2017, como en el Deportivo de la Coruña de 2012, Borja firmó el ascenso. Esa 'racha' se le rompía en la segunda etapa blanquivioleta. Tras regresar, nuevamente, de la India, ya que el primer regreso fue para jugar en la Sociedad Deportiva Éibar, Borja consumaba uno de los grandes objetivos que había tenido desde su salida de Valladolid en 2010.
Inicialmente firmaba por media temporada, pero su protagonismo y minutos de juego le hacían renovar por una más. Con más de 1.200 minutos, repartidos en 17 partidos, el gallego se ganaba, tras una cláusula de su contrato, una renovación a la que renunciaría tras saber que el nuevo cuerpo técnico no contaba con él. A nivel de minutos se la había ganado. A nivel de juego y rendimiento, posiblemente también. Afianzado en la titularidad tras las primeras aportaciones desde el banquillo, Miguel Ángel Portugal, primero, y Alberto López, después, confiaron en el '6' para que dirigiera la nave pucelana.
La ausencia de Álvaro Rubio y André Leão dejaban en bandeja la oportunidad a un Borja que no desaprovechó esa primera titularidad. Junto con Pedro Tiba guió al equipo a una de las mayores, sino la única, alegría de la temporada 2015/2016. Con el nuevo fichaje sobre el terreno de juego, el Pucela se impuso (2-4) al Real Oviedo en el Nuevo Estadio Carlos Tartiere. Posiblemente, en muchos ámbitos del juego se había ganado una renovación sobre la que dudaban los lectores de ElDesmarque Valladolid y que terminó descartando el criterio de Paco Herrera.
Sus dos últimos éxitos
Ahora, 13 meses después, Borja Fernández cumplirá ese año de contrato que se ganó en minutos de juego y vivirá ese objetivo de estar en Valladolid más allá de junio de 2016, como expuso en su última presentación. Ese sueño ha tardado en cumplirse, pero mientras tanto, el centrocampista no ha estado parado. Ni mucho menos. Regresa a Valladolid tras ser campeón de la Indian Super League y después de dejar un poso inolvidable en el Almería.
Consumado el éxito de ganar la competición india desde el punto de penalti, Borja firmó seis meses por el equipo andaluz. Tiempo para jugar 1.678 minutos, repartidos en 20 partidos, anotar dos goles y "romper moldes". Tras una reciente negociación con el equipo rojiblanco para su renovación, Borja regresa a Valladolid. Se pone en manos de Luis César Sampedro para enseñar al entrenador, parte de sus ayudantes y gran parte del vestuario qué es el Real Valladolid. Lo podrá hacer desde el terreno de juego y así ampliar una experiencia que no necesita presentación en Valladolid por haber jugado 157 de blanquivioleta.