Cárcel, alcohol, violencia... Jairo 'El Tigre' Castillo se confiesa
Su etapa en LaLiga se limitó a media temporada 2004/2005 en el Real Valladolid en la que anotó dos goles en 12 partidos disputados tras la marcha de Aritz Aduriz. El colombiano Jairo 'El Tigre' Castillo pasó bastante desapercibido en la Segunda División española, pero no en su país. Por eso, Marca Claro ha recopilado ahora todos los pecados y excentricidades de un futbolista que, poco a poco, se ha ido confesando y sorprendiendo con ello cada vez más a sus compatriotas.
Querido dentro de los campos, sobre todo en el América de Cali, con el que ganó tres Ligas y una Copa Merconorte, el exdelantero también se hizo famoso por sus actuaciones fuera de ellos.
En agosto de 2001, tuvo un accidente precisamente en la ciudad de Cali. Tras no detenerse en un semáforo en rojo, su vehículo intentó esquivar un taxi, pero el resultado terminó siendo peor, falleciendo las hermanas Claudia y Katerine Ojeda, de 21 años. Años más tarde fue declarado culpable por ir borracho y condenado en primera instancia a 36 meses de cárcel con beneficio de libertad condicional. Esto le hizo sumergirse en "los días más amargos" de su vida, "pasando por la penosa circunstancia que la opinión nacional conoce y que me duele y avergüenza. Me equivoqué, pido disculpas y perdón. Hubiera preferido ese desenlace fatal para mí".
Y es que Castillo reconoce que tenía un grave problema con el alcohol y que, con cualquier contratiempo, se refugiaba en la bebida. En 1998, en Tumaco, también arrolló a un motociclista, el cual perdió una pierna. Años más tarde, en febrero de 2016, Adriana María Paredes, entonces su pareja, le denunció tras ser agredida "en la cara, cuello y cuerpo" cuando éste se encontraba bajo los efectos del alcohol. Esto motivó su separación.
Triste final de su carrera
El 17 de diciembre de 2011, en el Estadio Olímpico Pascual Guerrero, ante el Patriotas Boyacá, Jairo erró un penalti, lo que ocasionó el descenso de la Mechita, convirtiéndose en el "partido más triste" de su vida". A pesar de ello, Jairo quiso seguir su carrera en el equipo tras el descenso, revelando por qué no siguió: "Había unos capos en el club que dijeron que no y entonces no se dio".
Su carrera quedó tocada a partir de entonces y ya no levantó cabeza. Incluso fue despojado de su apodo 'El Tigre', que pasó a llevar consigo el también colombiano Radamel Falcao: "La gente se acuerda del más reciente y así se olvida de todo lo que yo hice, pero le pido a mi país que me entienda. Yo me pregunto: ¿dónde queda el respeto por una trayectoria? Hablé con gente experta y me da la razón. Me duele leer mensajes con el hashtag #FuerzaTigre y saber que no son para mí, cuando este 'Tigre' también necesita fuerza incluso ahora".
Que este sujeto pida reconocimiento a su trayectoría es como para echarse a temblar,su curriculun es para hacer una película,lo único bueno es que vistió la elastica del Real Valladolid con más pena que gloría,la cara lo dice todo...SIEMPRE PUCELA.