"Cuando llegamos los jugadores estaban convencidos de que nada les podía salvar"
Fran Escribá, exentrenador del Celta de Vigo, participó en un larga charla en la que sus vivencias en el seno del cuadro celeste tuvieron una importante cuota de protagonismo. El técnico valenciano confesó la nula confianza que tenía la plantilla celeste en lograr el objetivo de la salvación tras el paso de Mohamed y Cardoso por el banquillo y por la lesión de Iago Aspas.
"Uno veía al Celta de la temporada pasada sin tener una gran plantilla, no tenía por qué estar tan abajo. Una de las cosas que había que dar al vestuario era tranquilidad. Cuando llegas a un equipo así, hay un exceso de ansiedad", recordaba el técnico en un charla organizada por la RFFM.
Por ello Escribá relata que "lo primero que hicimos fue intentar dar tranquilidad al vestuario. A partir de ahí, confianza, no solo en ellos mismos si no en el colectivo", ya que en este caso "lo encontramos muy tocado. Ellos estaban convencidos de que se iban a segunda división y nada les iba a salvar".
Rubén Blanco y Sergio Álvarez
Escribá también habló largo y tendido sobre los dos porteros que tenía en la plantilla, Sergio y Rubén. ". Le dije a Nando que 'me gusta mucho Rubén, me gusta mucho Sergio pero quiero que intervengan más en balón parado'", recordó.
El técnico prefería que Sergio y Rubén "se equivoquen" a que no sean "el clásico portero que se queda debajo de portería", una faceta en la que sin duda Rubén Blanco, meta titular ha mejorado.