La magia de Iago Aspas da el triunfo al Celta

Un Celta de Vigo coral pero con una gran estrella, Iago Aspas, logró la primera victoria de la temporada en un ajustado partido en el que el Celta mereció un triunfo más holgado ante el Valencia. Los de Óscar García disfrutaron de más de 20 remates a puerta pero solo dos acabaron en el fondo de las mallas, los dos de un Aspas superlativo.

Buen arranque de un Celta que nada más comenzar el partido dispuso de una ocasión en las botas de Denis Suárez, que volvía a disputar un partido oficial tras haber caído lesionado hace varios meses ante el Mallorca. El disparo del centrocampista se marchó por encima del larguero de la meta de Domenech. Seguía atacando el Celta, que lograba generar más jugadas peligrosas en unos trepidantes minutos iniciales en los que aparecían Olaza, Aspas, Nolito y Emre Mor.

El buen trabajo celeste no tardaba en encontrar un agujero en la zaga valenciana a través de una maravillosa jugada de Nolito. El gaditano lograba asistir a Aspas y el moañés, al límite del fuera de juego, se deshacía de Domenech para marcar el primer gol de la temporada en el 15'. El VAR, tras una larga deliberación, concedió el tanto al canterano.

Tras un disparo desviado de Kondogbia el Celta pudo marcar el segundo en una falta directa provocada por Lucas Olaza pero Jaume despejó con los puños el centro chut de Nolito. Tapia, en el minuto 24, veía la primera amarilla del encuentro tras llegar tarde a un corte con Maxi Gomez. Los de Óscar jugaban con dos marchas más que un rival que apenas era capaz de salir de su área.

El Valencia, tímidamente, buscaba estirar sus líneas y llegar, aunque fuese con balones parados, a la inmediaciones de Iván Villar, pero era de nuevo el Celta el que lograba generar la ocasión más clara gracias a la velocidad endiablada de Emre Mor. El trallazo del turco se fue ligeramente desviado cuando el partido se acercaba al minuto 40.

La primera jugada de peligro valenciana, un disparo de Maxi Gómez, fue tapado por un providencial corte de Murillo justo al filo del descanso al que llegó el Celta con una merecida, pero escasa ventaja de 1-0.

Todo lo bueno que hizo el Celta en 45 minutos se fue al traste cuando no había pasado ni un minuto de la segunda parte. Maxi Gómez colocaba, de primeras, el balón a la escuadra anticipándose a Murillo. Otro exceleste, Wass, era quien ponía el centro al uruguayo.

Aspas volvía a poner al Celta en ventaja con una obra de arte en forma de falta directa. Nolito era derribado en la frontal y en el lanzamiento del moañés la pelota lo quitaba las telarañas a la portería de Domenech. Sin tiempo para que el Valencia reaccionase Nolito pudo marcar el 3-1 en un error de la zaga che que, inexplicablemente, no acertó a definir en el uno contra uno.

Villar tenía que sacar una buena manopla en el 64' y Óscar reaccionaba dando entrada a Okay Yokuslu y Miguel Baeza para darle nuevos pulmones al mediocampo celeste. También entraba Brais Méndez por un esforzado Emre Mor, que sin embargo no había estado tan acertado en este encuentro. El Celta, una vez que había reforzado la medular, buscó de nuevo el tercer tanto.

Pasaban los minutos sin que el marcador se moviese y Óscar García apostaba por dar entrada a Araujo por un agotado Murillo. Además Tapia, completamente extenuado pedía el cambio y el técnico confiaba en Gabri Veiga, joven canterano celeste. Brais Méndez estrellaba en balón en el larguero en una bonita jugaba del ataque celeste, ni un minuto después, era Baeza el que se encontraba con el palo.

Aidoo pudo cometer un penalti sobre Vallejo que ni el colegiado ni el VAR vieron y el Celta encaraba los últimos minutos con el 2-1 a su favor. Le tocó sufrir al Celta, el Valencia se lanzó a por el empate a la desesperada y Villar tuvo que sacar una buena mano a lanzamiento de falta directa de Maxi Gómez en el minuto 93'. Brais, en un buen partido desde el banquillo, pudo sentenciar el choque en el 95' pero el partido que terminó con la primera victoria del Celta de la temporada gracias a su estrella, Iago Aspas.