El Tigre enjaulado
En las últimas jornadas, Jorge Pombo ha perdido protagonismo en el Real Zaragoza. El delantero blanquillo ha dejado de entrar en los planes de inicio de Lucas Alcaraz. Esta circunstancia coincide con los partidos inmediatamente posteriores a su rajada frente a la afición blanquilla.
Y es que el 'Tigre' lo había jugado prácticamente todo hasta el momento. Había sido titular en todos los partidos de la temporada... hasta la visita del Córdoba. A saber: 16 partidos como titular, 12 de ellos jugados completos y un total de 1.324 minutos en esos 16 primeros partidos.
Después de salir ante la afición tras la derrota frente al Cádiz, Lucas Alcaraz le ha dejado en el banquillo. En los dos partidos siguientes, ante Córdoba (21 minutos) y Dépor (30 minutos) fue suplente y entró desde el banquillo. El técnico granadino ha apostado por una doble punta formada por Álvaro Vázquez y Marc Gual. Y lo cierto es que el equipo no ha mejorado sin él. El marcador en blanco frente al Córdoba, y un gol ante el Dépor en la derrota por 3-1. Aunque, siendo realistas, tampoco Pombo cambió el sino del partido entrando como resulsivo.
Entre las razones de su bajo rendimiento, es posible que el sistema de cinco defensas, en el que los carrileros ocupan toda la banda, no le favorezca. Como tampoco lo hacía el rombo sin extremos de Imanol Idiakez. Los mejores destellos de fútbol de Jorge Pombo siempre fueron partiendo desde segunda línea, bien como extremo tirado a banda izquierda, o bien como mediapunta.
Viendo el fútbol de cara y trazando diagonales hacia portería siempre aportó más que ocupando el área desde el inicio. Jugando en punta, Pombo se ve obligado a jugar la mayor parte del tiempo de espaldas a la portería rival. Ese fútbol, al menos de momento, no se encuentra entre sus amplios registros técnico-tácticos.
Lo que sí es un hecho es que su participación ha decrecido desde la tremenda rajada que protagonizó ante la afición. En ella, reconoció que había jugadores en el vestuario blanquillo que no se esforzaban lo suficiente. También, que los problemas ofensivos que tenía el Zaragoza con Pombo no se han resuelto sin él. ¿Cambiará la dinámica del atacante con Víctor Fernández?