Una obligada reinvención del once
La llegada de Víctor Fernández al Real Zaragoza ha supuesto un cambio notable en el juego y resultados del equipo. El último ejemplo, la victoria en el estadio municipal de La Romareda ante el Real Oviedo, que al margen de los tres puntos, dejó el peaje de la lesión de Daniel Lasure, cuya lesión muscular le impedirá formar en el once las próximas semanas.
Un serio contratiempo para el técnico aragonés, que durante sus primeros encuentros había mostrado una idea fija de juego, contando con un número limitado de jugadores, hombres de confianza para el entrenador, que respondieron con buenas actuaciones. Por desgracia, poco a poco se han ido cayendo, obligando a Víctor a remodelar sus ideas introduciendo cambios.
En las últimas semanas, hasta tres de los fijos han sufrido diversas lesiones: Benito, Lasure y Javi Ros. Tres hombres que no son únicamente importantes para el entrenador aragonés, sino que lo han sido durante toda la temporada, formando parte de los jugadores que más minutos han acumulado a lo largo de la temporada con la elástica blanquilla. Por detrás de Cristian Álvarez y Pombo aparecen los dos laterales, Lasure (1.765 minutos) y Benito (1.528), mientras que el centrocampista navarro es el sexto (1.425).
Una circunstancia que obligará al técnico zaragocista a realizar variaciones en el once como ya ha sucedido en las últimas jornadas. Ante la lesión de Javi Ros, la presencia de Zapater como titular ha ofrecido un recambio de garantía; lo mismo sucedió con Delmás, que disputó el último encuentro por las molestias de Benito. Será ahora el turno de sustituir a Daniel Lasure, uno de los futbolistas de la plantilla que no acaba de contar con un relevo natural, por lo que se abre el abanico para Víctor Fernández. El entrenador tratará de seguir reinventándose con los mismos resultados mostrados en partidos anteriores.