Kaymer, un káiser en Estados Unidos
El káiser del golf se encaramó al trono del Abierto de golf de Estados Unidos, que se ha disputado esta semana en Pinehurst (Carolina del Norte), con una ventaja inapelable de ocho golpes sobre los segundos clasificados, los estadounidenses Erik Compton y Rickie Fowler.
Martin Kaymer pasó de doblegar los 'greenes' en las primeras jornadas, con dos rondas de cinco bajo par, a dominar el campo número dos de Pinehurst, replicando la ventaja de Rory McIlroy en la edición de 2011 y acercándose a los 15 golpes de diferencia con los que Tiger Woods ganó en 2000.
Kaymer es el noveno golfista no estadounidense que le arrebata una vez más el US Open a los favoritos locales desde aquella histórica victoria de Woods. En esta edición, el monstruoso recorrido devoró pronto a buena parte del conjunto de estrellas estadounidenses encabezado por Phil Michelson y Bubba Watson.
La última esperanza del público que abarrotaba Pinehurst era el joven Rickie Fowler, que compartió partido con Martin Kaymer y no logró aproximarse a la estela del "bólido" alemán. Fowler acabó en el segundo puesto empatado con el también estadounidense Erik Compton.
Mientras el káiser del golf consolidaba su imperio en Pinehurst, fueron quedando atrás otros favoritos internacionales como el norirlandés Rory McIlroy, el inglés Justin Rose o el español Sergio García, que terminaron fuera de los diez primeros puestos de la clasificación.
Al terminar su hazaña de cuatro días en el US Open, Martin Kaymer recibió la calurosa felicitación de sus compatriotas en la competición y de la golfista alemana Sandra Gal, que acaba de llegar a Pinehurst para disputar el Abierto de Estados Unidos femenino, que, por primera vez en la historia, se disputa a partir del jueves en el mismo recorrido.
