Rusia pide asistencia judicial a Suiza sobre los envases de pruebas de dopaje
El Gobierno de Rusia ha pedido cooperación judicial al Ministerio de Justicia de Suiza para obtener información sobre los envases que produce una pequeña empresa familiar suiza para las pruebas de dopaje que se efectúan a atletas en grandes eventos internacionales, confirmó hoy el Gobierno.Las autoridades rusas piden a Suiza información sobre la conservación y la apertura de los tubitos, señaló hoy el diario germanófono "Ostschweiz am Sonntag".
Un portavoz del Ministerio de Justicia confirmó a ese diario que ha recibido la solicitud de la Fiscalía rusa y que la ha presentado ante el Ministerio Público suizo para que la ejecute, de acuerdo con la misma fuente.
El Grupo Berlinger, que se encuentra en el cantón de San Galo y da trabajo a 92 empleados en una localidad de apenas 1.000 habitantes, produce los envases que se utilizan en los eventos deportivos internacionales en las pruebas antidopaje.
Se trata de los mismos tubos que un trabajador del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) obtuvo en los Juegos Olímpicos de invierno de 2012 en Sochi para cambiar la orina de atletas dopados por pruebas "limpias", según el diario suizo.
Así consta en el Informe McLaren de julio pasado, que acusó al Estado ruso de promover el dopaje masivo y por ello un terció de la delegación rusa no pudo competir en los Juegos Olímpicos en Brasil.
El jurista canadiense indagó en una serie de envases de atletas rusos y afirmó que éstos se habían abierto sin autorización.
Los tubos están fabricados de tal manera que se pueden posteriormente detectar y probar manipulaciones, según el portavoz de la empresa familiar suiza que los produce.
Se trata de envases certificados en Suiza que contienen cierres de seguridad y que cuentan con una cuota de mercado de casi el 90 % en el sector de las pruebas de dopaje.
Sin embargo, la empresa no influye en las pruebas ni en los procesos en los laboratorios.
Rusia rechaza las afirmaciones del Informe McLaren y acusa de trato injusto" a las organizaciones internacionales, por lo que se ha creado una comisión de investigación que responde directamente al presidente ruso, Vladímir Putin.