Así vivimos el Sevilla-Girona

Sevilla y Girona se citaban en la matinal del domingo en el Sánchez-Pizjuán, en el partido correspondiente a la jornada 23 de LaLiga Santander. Los pupilos de Montella llegaban con la necesidad de volver a ganar en la competición doméstica para recuperar la sexta plaza de la tabla y meter presión a Villarreal y Valencia en su difícil lucha por la Champions, pero con la moral por las nubes tras sellar su pase a la final de la Copa del Rey, donde se enfrentará al FC Barcelona. Por su parte, los hombres de  Pablo Machín, tenían entre ceja y ceja hacer un buen papel en Nervión para seguir soñando con Europa.

El partido comenzó a un ritmo muy elevado, el Sevilla, espoleado por su público, buscaba constantemente la portería defendida por Bono. Un pase de la muerte de Pizarro no encontró rematador y minutos más tarde, fue Sarabia el que estrelló el balón en el lateral de la red en el mano a mano ante el meta marroquí. El Girona se recompuso y obligó a Sergio Rico a sacar sus mejores armas para salvar a su equipo, primero con una prodigiosa mano y acto seguido con un pie felino.
Corría el minuto 40 de partido cuando Muriel sacó la mano a pasear dentro del área hispalense y el colegiado no dudó, penalti. Para terminar su colosal actuación en el primer acto, el guardameta de Montequinto le adivinó las intenciones a Aday y detuvo el lanzamiento. Nervión despidió a los protagonistas al descanso entre los pitos para Jaime Latre y la ovación al meta sevillista, que estaba siendo muy discutido en los últimos encuentros.
El segundo tiempo no pudo comenzar mejor para los hombres de Montella. Cuando aún no se había cumplido el minuto de juego, un balón largo de Lenglet para Correa, lo picó el argentino ante la salida de Bono, Ramalho evitó el gol en la línea de gol, pero Sarabia llegaba como un avión para remachar el esférico. El Sevilla, muy cansado tras el esfuerzo copero del miércoles, bajó el ritmo en la segunda mitad, de hecho Muriel tuvo que ser sustituido. El Girona lo aprovechó para meter el miedo en el cuerpo a los hispalenses, pero ya no había tiempo para más.
Con esta victoria, el Sevilla recupera la sexta posición de la tabla y se coloca a tan solo un punto del Villarreal, que tropezó ante el Alavés en el estadio de la Cerámica, y a cuatro del Valencia, que marca la zona Champions. Por su parte, el Girona volvió a la senda de la derrota cinco jornadas después y se va de vacío de Andalucía, pero con la cabeza bien alta.

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