La razón por la que Sarabia puntuó tan bajo en Comunio en el Camp Nou
Pablo Sarabia, jugador del Sevilla FC, se ha convertido en uno de los grandes nombres de la polémica en Comunio. El jugador sevillista completó una digna actuación en el Camp Nou e incluso llegó a ejecutar el primer tanto sevillista. Sin embargo, todos aquellos que contaban con él en sus equipos, perdieron la ilusión al ver los puntos finales del extremo. ¿Qué pasó con Pablo Sarabia? ¿Porqué recibió tan baja puntuación?
Tal y como muestra la página web de Comunio (*En otros juegos mánager sí podría haber recibido más puntos), el futbolista nervionense recibió únicamente 2 puntos tras su partido ante el Barça. Las estadísticas de Sofascore -claves en la puntuación de los jugadores en el popular juego mánager- dejaron al sevillista como uno de los peores jugadores del partido.
Según la conocida web de estadística, Sarabia recibió el aprobado (6.0), algo que le lleva, según la última tabla estadística publicada, a recibir sólo 2 puntos en Comunio.
Tabla de equivalencias media estadística/puntos
0-4,9 --- Nota Comunio 0 ----4 puntos
5,0-6,0 --- Nota Comunio 0.5 --- -2 puntos
6,1-6,5 --- Nota Comunio 1 --- 2 puntos
6,6-6,9 --- Nota Comunio 1.5 --- 4 puntos
7,0-7,5 --- Nota Comunio 2 --- 6 puntos
7,6-7,9 --- Nota Comunio 2.5 --- 8 puntos
8,0-9,5 --- Nota Comunio 3 --- 10 puntos
9,6-10 --- Nota Comunio 4 --- 12 puntos
Sin embargo, más allá de sus números en la actuación, la sorpresa llegó al ver que los puntos supuestamente sumados por el gol no estaban. ¿Qué sucedió realmente?
Simple: la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el árbitro, decretó que el tanto no había sido de Pablo Sarabia, sino que era de Clement Lenglet en propia puerta al, según siempre la normativa, desviar la dirección inicial del disparo del sevillista.
Con dicho decreto, Sofascore decidió seguir la línea de la RFEF y conceder el tanto a Lenglet en propia puerta, significando una importante pérdida de puntos de Pablo Sarabia respecto a todos los que esperaban los aficionados.
