Alonso cumplió su predicción de ser el nuevo "rey" en las 24 Horas de Daytona
El piloto español Fernando Alonso, nuevo campeón de las 24 Horas de Daytona, con el equipo Wayne Taylor Racing, cumplió con la predicción que al concluir la primera gran prueba de resistencia del calendario automovilístico en Estados Unidos iba a ser un ganador.
Eso fue lo que sucedió después que se completasen 593 vueltas al Daytona International Speedway y se viviese una carrera caótica por culpa de la lluvia que generó 18 apariciones de banderas, incluidas dos rojas, y la segunda que fue la definitiva sin que los monoplazas pudiesen salir a la pista para competir las dos horas finales.
El año pasado, Alonso hizo su debut con el esfuerzo de Zak Brown United Autosport en un LMP2 Ligier, y la experiencia final no fue la mejor por la clasificación, pero sí todo lo que aprendió relacionado con el tipo de competición, muy diferente a la Formula Uno y la competición en Europa.
"Definitivamente siento que estoy en una posición mucho mejor este año en comparación con el año pasado y mi mentalización es la de que podemos ganar la prueba", reconoció Alonso en todas las entrevistas que ofreció antes de la prueba.
Su argumento fue razonado con el hecho de que llegaba a la prueba con el conocimiento y la experiencia de correr con coches en Estados Unidos, donde la primera novedad importante es que van con habitáculo cerrado.
"Todo eso está superado y estoy listo para disfrutar un poco más y usar la experiencia de mi primera temporada en el WEC también", dijo. Esos conocimientos y su gran clase al volante fue lo que le permitieron hacer historia mientras cumplía con la predicción de ser nuevo campeón de las 24 Horas de Daytona.
Alonso, de 37 años, ahora intentará unirse al legendario piloto inglés Graham Hill como los únicos corredores que ganaron la Triple Corona del Gran Premio de Mónaco, las 24 horas de Le Mans y las 500 Millas de Indianápolis cuando compita en esta última, el próximo 26 de mayo.
El piloto español, doble campeón de la Formula Uno, fue decisivo en su primer turno al volante del Konica Minolta Cadillac DPi No.10 cuando lo puso de líder en la prueba y luego tras el trabajo nocturno del japonés Kamui Kobayashi, que lo mantuvo al frente, Alonso fue el "maestro" que se encargó de superar las adversidades de un pista convertida en auténtica piscina y muy insegura.
El momento clave de la carrera se produjo cuando el brasileño Felipe Nasr, del equipo Whelen Engineering Racing con su Cadillac DPi, No.31, se salió de la pista por causa de la lluvia y Alonso mantuvo la compostura que le permitió quedarse líder provisional de la prueba hasta que la carrera, para no volver a comenzar después de una segunda bandera roja sin precedentes para la lluvia.
Los responsables de la carrera, 10 minutos antes que finalizase la prueba, debido a las condiciones empapadas, mostraron la bandera a cuadros y Alonso pudo celebrar una nueva corona como "rey" de la competición de resistencia en las míticas carreras de Le Mans y Daytona.