Mbappé y su Ferrari de más de 400.000 euros que no puede conducir: la edición limitada que tiene en su garaje
Kylian Mbappé es uno de los deportistas que más ingresos recibe por su carrera profesional. El salario del delantero del Paris Saint-Germain ronda los 72 millones de euros, a esto se le suma los contratos por patrocinios y la cifra asciende a unos 100 millones de euros anuales. Mbappé puede permitirse comprar productos de lujo, como relojes, una mansión con vistas a la Torre Eiffel e incluso coches de alta gama, aunque no tenga el carnet de conducir.
Mbappé tiene en el garaje de su casa un Ferrari de edición limitada con un precio que no está al alcance de cualquiera. En la revista GQ afirman que tiene un Ferrari 488 Pista. Es un súper deportivo derivado del 488 GTB que cuando salió en 2018 equipaba el motor V8 más potente de la historia de Ferrari: nada menos que 720 CV gracias a su 3.9 biturbo, lo que supone una potencia específica de 185 CV/litro y 50 CV más que el GTB.
Este deportivo en el momento que salió al mercado superaba los 300.000 euros. Era un modelo de unidades limitadas y que solo se vendía a clientes especiales. Actualmente, comprar una unidad en el mercado de segunda mano podría tener un precio entre los 400.000 y 500.000 euros.
El motivo por el que Mbappé no tiene carnet
Los futbolistas suelen tener como prioridad sacarse el carnet de conducir para poder manejar sus coches e incluso disfrutar de los automóviles de lujo que pueden adquirir. Se conocen pocos futbolistas que no tengan licencia de conducir y Mbappé es la excepción.
Kylian confesaba al medio británico Bleacher Report el motivo por el que con 24 años aún no se había sacado la licencia: "Es una de las desventajas de triunfar pronto. Me perdí cosas tan sencillas como tener carné de conducir. Creo que todo el mundo tiene uno. Para mucha gente el carné es un requisito, pero para mí no lo era. Aunque es sinónimo de autonomía, yo tuve mi autonomía muy pronto porque tenía conductores a mi disposición. Nunca fue una prioridad", aseguró. Y es que, cuando el delantero llegó al Paris Saint-Germain con tan solo 18 años, el club francés puso a su disposición un mayordomo, un cocinero y un chófer.