Dembélé está pagando caro su fuga del Barça bajo el calor de Xavi Hernández

Ousmane Dembélé comienza a estar preocupado por su rol en el Paris Saint-Germain. Aunque Nasser Al-Khelaïfi le garantizó que sería titular indiscutible y una de las estrellas del equipo, otorgándole el dorsal ‘10’ que quedó libre tras la venta de Neymar Junior al Al-Hilal de Arabia Saudí, lo cierto es que tendrá muy complicado disponer de los minutos que desearía. Porque la competencia que existe en su demarcación es feroz, y deberá de hacer méritos.

A diferencia de lo que ocurría en el Barça, donde era un fijo en los esquemas de Xavi Hernández independientemente de su estado de forma, al disponer de la completa confianza del entrenador, todo ha cambiado en el Parque de los Príncipes. Tendrá que luchar para convencer a Luis Enrique, quien exige a todos sus futbolistas un compromiso defensivo que ‘El Mosquito’ ha demostrado no tener durante toda su carrera deportiva.

Kylian Mbappé es el único que tiene el puesto asegurado en el tridente, y a su lado hay dos huecos que muchos futbolistas que pelearán por ocupar. Por ejemplo, en la plantilla están Carlos Soler y Marco Asensio, que son del completo agrado de ‘Lucho’, como demostró durante su etapa en la selección española. Además, en el caso del extremo mallorquín, ha comenzado con muy buen pie su andadura en la Ligue 1, marcando goles y dejando buenas actuaciones, así que será difícil que no tenga protagonismo.

Y el PSG hizo una fuerte apuesta por Gonçalo Ramos y por Randal Kolo Muani, pagando 80 y 90 millones de euros, respectivamente, por cada uno de ellos. De modo que no tendría mucho sentido que fueran suplentes habituales, después de haberse gastado tanto dinero. Por lo tanto, como explica el diario ‘Sport’, Dembélé estará obligado a sudar sangre para colarse en los onces iniciales. Y si no juega, su presencia en la Eurocopa no estará garantizada.

Quedarse en el Camp Nou hubiese sido lo más sencillo para el canterano del Stade de Rennes…