El mosqueo de Quique con el desastre a balón parado: “Es una cuestión de actitud, atención y compromiso”

El Sevilla FC ha vuelto a perder en casa, por tercera vez consecutiva en LALIGA EA Sports, a pesar de que ha pasado por Nervión un Deportivo Alavés que no hizo gran cosa, y al que estuvo a punto de remontar. El balón parado fue clave, especialmente por la catastrófica manera en la que la defendió el equipo, y Quique Sánchez Flores se mostró visiblemente enfadado por ello.

“Sin duda. Es una parte importante del trabajo de la semana, el momento donde más tiempo tenemos para pensar acciones predeterminadas, sabemos dónde va el balón, dónde van los jugadores… Que se nos cruce por en medio la tarea a balón parado en un partido en el que estábamos muy bien desde el inicio ha cambiado todo. No solo los que entraron, sino también los que no entraron. Todo el tiempo esa amenaza, es una sensación incomodísima, pocas veces la he vivido así y el partido se decidió lógicamente ahí”, expresaba en la rueda de prensa postpartido.

Quique Sánchez Flores comentó que ha sido uno de los aspectos del juego en el que menos han incidido desde su llegada, ya que las estadísticas eran buenas. “Cuando llegamos, en cuanto a balón parado, ha sido la parte que más hemos respetado respecto a lo que venían haciendo. Vimos que marcaban en zona, los números, que se sentían cómodos, y pensamos que no cambiando esa situación se iba a mantener. Hoy han salido fantasmas que podían salir, trabajamos muchísimas horas el balón parado, con gente especializada en eso, pero nos penaliza a todos, nos saca de partidos en los que estamos cómodos, nos deja muy fríos y cambia el espíritu del equipo, que estaba jugando bien, llevó al Alavés a cambiar la forma de defender. Es una tarea que se nos ha cruzado en el camino, creo que podríamos haber salido casi ilesos en caso de haber empatado, pero hemos vuelto a caer por eso lado y nada que decir”.

Ahondó aún más Quique en este aspecto del juego. “Lo que hemos hecho es respetar unos números, por no cambiar todo al mismo tiempo. Había cosas más importantes que cambiar. Más allá de eso, es una cuestión de actitud y atención. Cuando una pelota viaja sabes donde tienes que estar parado, es el momento en el que mas tiempo tenemos para tomar decisiones, y ahí esta la atención, actitud, compromiso y muchas cosas que estos chicos tienen que reunir. Se tienen que dar cuenta de que les cambió la vida, el partido y el ambiente. Tenemos 40.000 personas en el estadio con una vibración brutal desde el minuto uno, y los alejamos. Es la parte del fútbol más controlable. Sabemos donde van los balones, donde se mueven los jugadores y donde van los movimientos de todos”, concretó.