Michu desvela que llevó la contraria a familiares por el Oviedo: "Por desgracia, de la mano del Sporting"

Las lesiones nos impidieron disfrutar más tiempo de Michu en los terrenos de juego. Pese a colgar las botas de manera obligada, el exfutbolista no se desvinculó del fútbol y crece como director deportivo. Eso sí, aunque en Burgos, nunca deja de lado a su Real Oviedo. Algo que demuestra día a día, así como ya hiciera durante su etapa como jugador con una decisión clave y una celebración con mensaje.

El que fuera atacante profesional ha concedido una interesante entrevista a La Media Inglesa en la que fue cuestionado por uno de los episodios más sonados de su trayectoria: la llamada del Real Sporting de Gijón.

Michu, jugador celeste en LALIGA HYPERMOTION por aquel entonces, tuvo en su mano el sueño de jugar en la máxima categoría nacional: "Estaba en el Celta en Segunda, que además no estaba siendo titular indiscutible y me llamó Manolo Preciado, que en paz descanse que además se lo agradezco de corazón, dándome la oportunidad de jugar en Primera División".

Su sentimiento carbayón le impidió aceptar la propuesta llevando incluso la contraria a sus padres: "El sueño de Michu era jugar en Primera, bueno, pues por desgracia, me llegó de la mano del Sporting. Me acuerdo perfectamente y mis padres me decían que no sabía lo que estaba rechazando, pero tenía algo dentro que me impedía firmarlo".

Michu y cómo nació su celebración tras la llamada del Sporting

El cuadro gijonés estaba dispuesto a pagar un importante traspaso por sus servicios, pero Michu optó por seguir en Vigo con un rol discreto... y en Segunda División: "Había acuerdo entre clubes, Celta-Sporting y creo que el traspaso era en torno a un millón de euros, y dije que no, que me quedaba en Segunda en el Celta sin ser titular indiscutible. Luego la suerte me sonrió y pude jugar en Primera en España, Reino Unido y en el Serie A".

Tras este episodio, Michu inició su andadura en la élite con el Rayo. Fue entonces cuando nació su icónica celebración que hasta Erling Haaland imita: "Cuando salió la negociación creo que me querían matar en todos lados: en el Sporting habían sacado un comunicado para que no me ficharan, el Oviedo que si iba para allá me iban a matar, en todos lados. Me dieron mucha caña, mucha gente en Gijón me dijeron que nunca llegaría a jugar en Primera y esa rabia que tenía dentro, tuve la fortuna de marcar muchos goles y esos haters desaparecen. Era rebelándome contra eso".