Juanfran Funes defiende el plan pese al sufrimiento: "Si queremos atrevernos, lo hacemos con todas las consecuencias"

El empate del Málaga CF en Zorrilla dejó más que un punto: dejó un mensaje. Juanfran Funes, que apenas suma dos partidos en el banquillo blanquiazul, volvió a mostrar personalidad para proteger a sus jugadores, asumir errores propios y reivindicar que el camino elegido pasa por el atrevimiento… incluso cuando la primera parte fue de las más pobres del curso. Niño rescató un punto y Funes rescató una idea: este Málaga quiere jugar sin miedo.

Un Málaga desdibujado que Funes no esconde

El técnico fue directo al analizar los primeros 45 minutos. Admitió una versión insuficiente del equipo, incapaz de ganar duelos, de avanzar y de poner en aprietos al Valladolid. Zorrilla, recordó, es un escenario complejo para tener la pelota, y el rival interpretó mejor el ritmo y la presión.

Aun así, Funes valoró especialmente que el gol encajado, provocado por un error de Alfonso Herrero, no generara el derrumbe emocional que sí habría ocurrido semanas atrás. “Me quedo con que el equipo mantuvo el tipo pese a dos dificultades claras”, señaló. La resiliencia, más que el punto, fue para él la clave invisible del partido.

En el descanso, explicó, pidió tres cosas: dominar mejor el eje, cargar más la zona de tres cuartos y buscar con más insistencia el área. El Málaga salió algo más valiente, con laterales profundos, interiores atacando zonas más altas y, sobre todo, con la convicción de seguir el plan sin mirar el marcador.

La identidad por encima del miedo

Funes volvió a insistir en la idea que quiere sembrar desde su llegada: el Málaga debe ser un equipo que se atreve. Y ese atrevimiento, remarcó, a veces trae fallos. Uno tan visible como el de Alfonso. Pero Funes lo blindó: “Es mío. Si queremos jugar así, lo hacemos todos juntos”.

El técnico también explicó que los cambios no fueron los previstos. Niño iba a salir… y acabó siendo quien empató. Las amarillas, el cansancio y el ritmo del partido obligaron a romper el plan original. “No es fácil entrar en un partido así”, reflexionó sobre los suplentes.

También elogió el nivel del Valladolid a balón parado,“el mejor de Segunda”, y el atrevimiento de su entrenador en situaciones poco habituales. Funes habló de respeto mutuo. Y de convicción: “Todos tendrán su oportunidad, pero nadie lo va a jugar todo. Ojalá podamos rotar más; sería una buena señal”.

El Málaga no brilló, pero tampoco se rompió. Y para Juanfran Funes, ese es el primer cimiento de un equipo que quiere recuperarse a base de identidad.