8 jugadores terminan contrato con el Deportivo de la Coruña esta semana y hay casos clave para el ascenso

Días movidos para el Deportivo de la Coruña. Están obligados a reconstruirse de nuevo, tras quedarse a las puertas del ascenso a La Liga SmartBank, y por el momento ya han perdido a Noel López, una de las grandes promesas de futuro, que ha firmado por el Real Madrid. También han llegado nuevos fichajes, como el de Gorka Santamaría o el de Isi Gómez, ambos procedentes del CD Badajoz y el de Víctor Narro, desde el Real Valladolid Promesas. Se espera que no sean los únicos refuerzos que Borja Jiménez Sáez reciba este verano.

Pero también habrá múltiples salidas. Por ejemplo, Mario Soriano, que ha vuelto al Atlético de Madrid, o Juergen Elitim, que tiene complicado seguir, al entrar en los planes del Watford. Aunque ahora mismo lo que más preocupa en Riazor es retener a la gran parte del bloque, pues hasta ocho futbolistas finalizan su contrato en apenas unos días. Y en el portal Riazor.org detallan que la continuidad de algunos de ellos es sumamente complicada.

El primero es el capitán, Álex Bergantiños, si bien en su caso están convencidos de que no se marchará, y prolongará su vínculo por otra campaña más. Por muchos cantos de sirena que reciba, siempre se ha mostrado muy fiel al conjunto gallego, y no parece que eso vaya a cambiar. Así que seguirá siendo, otro curso más, el dueño del centro del campo. En el bando contrario, futbolistas que ya se han despedido, encontramos a Álvaro Rey, a Rafa de Vicente, a Pablo Trigueros y a Diego Aguirre.

Este último lo ha hecho muy enfadado con la directiva del Dépor, asegurando que el trato que ha recibido no ha sido para nada justo, mostrándose muy desencantado. Para acabar, hay bastante incertidumbre en lo que rodea al futuro de Miku o de Jaime Sánchez. Borja Jiménez está satisfecho con el rendimiento que han ofrecido, pero tampoco acaban de tener asegurada su plaza. Por mucho que hayan mostrado un buen nivel, todavía deben negociar, y no se descarta nada a estas alturas.

Y en una tesitura similar está Antoñito, aunque en su caso, es él quien tiene la sartén por el mango. La idea de los coruñeses es retenerlo, pues ha sido imprescindible en los meses que ha estado, una postura que el veterano defensor de 34 años no acaba de compartir.

Se siente agradecido por la oportunidad, pero quiere esperar antes de decidir.