Lillo se encontró la presión de El Molinón

El encuentro que medía al Sporting de Gijón con el CA Osasuna y que terminó con la clara victoria del conjunto asturiano, traía de regreso al municipal gijonés al exjugador rojiblanco Lillo, que fue el centro de las iras de los aficionados locales. El lateral, tras abandonar el pasado verano las filas sportinguistas, vivió todo el encuentro acompañado de los pitos de la grada.

Lillo conoció la presión de El Molinón, desde el primer minuto y hasta el 74 en el que se fue sustituido, el defensa alicantino vivió todas sus acciones acompañado por la música de viento que le dedicó la que fue su afición. Tras abandonar el conjunto rojiblanco el pasado verano, manifestó que no lo había pasado bien en Gijón, que no había estado a gusto, palabras que los sportinguistas demostraron que no habían olvidado.
El lateral sufrió los pitos de la grada y sufrió a un Jony imparable, que le complicó aún más su trabajo. El técnico Diego Martínez tuvo que terminar sustituyendo al defensa para evitar una expulsión que estuvo cercana, a la amarilla vista en el primer tiempo pudo sumar una segunda amonestación, que el colegiado del encuentro acabó perdonando.
La presión a la que hizo mención Lillo al dejar el equipo rojiblanco en el pasado verano se le apareció concentrada en un solo encuentro.