Salida a la vista: se despide de sus compañeros antes de rescindir con el Real Oviedo
El futuro de Simone Grippo pinta lejos del Real Oviedo. A primera hora de este viernes, el defensor acudía a El Requexón para despedirse de sus compañeros y su salida del club se hará oficial en las próximas horas. Pese a que tenía contrato hasta junio de 2022, el próximo destino del suizo no está decidido, si bien se habla de un posible regreso a su país.
Grippo lleva semanas ejercitándose al margen, recuperándose de una lesión que sufrió en el tramo final de la pasada campaña ante el Málaga CF. Pero ya no volverá a enfundarse la elástica azul nunca más. El helvético abandonará el club antes del cierre del mercado de fichajes, dejando una importante huella en el vestuario, donde en el año y medio que lleva en el Real Oviedo ha adquirido un peso muy relevante.
En la sesión matinal de este viernes, tal como informa El Comercio, Grippo saltó al campo de entrenamiento pero no para ejercitarse a las órdenes del 'Cuco' Ziganda. Lo hizo vestido de calle, y dirigió unas palabras a los que todavía son sus compañeros y al cuerpo técnico, quienes le respondieron con un sentido abrazo y una ovación.
Con la salida del suizo, el primer equipo del Real Oviedo se queda sin uno de sus cuatro capitanes. Si bien no se puede descartar que otro de ellos, Alejandro Arribas, también haga las maletas antes del cierre del mercado. Por todos es conocida la historia de su fichaje fallido por el Aris de Salónica este mismo verano y su marcha a Grecia no está ni mucho menos descartada.
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— Real Oviedo (@RealOviedo) August 27, 2021
Se va el único jugador capaz de salir con la pelota jugada desde atrás y cuyos pases rompían las líneas contrarias, aparte de su considerable estatura que le daba protección en los balones parados. Una lástima. Este año volveremos a sufrir de lo lindo.
Qué cosas más raras pasan en este club. Grippo era un claro titular junto a Costas y por delante de Calvo. Además de defender bien, tenía buena salida de balón, sacaba bien las faltas y creaba peligro en los córners. Además, se le veía con personalidad y muy deportivo en el campo, siempre disculpándose con el contrario tras una falta. Se le echará de menos. Ahora nos quedamos con Arribas, que se quiso marchar y que es muy irregular, y con Cristian, que rinde más de lateral, porque de central pierde mucho la posición y le falta estatura