Conexión equipo-ciudad: Pombo resucita el juego del 'Mangüiti'
Las caras de los jugadores del Cádiz CF reflejan alegría. A pesar del liderato perenne con el que ha convivido toda la temporada, los altibajos -inevitables- también han hecho acto de presencia a lo largo del curso, si bien la última victoria ante el Almería, rival directo, proyecta aún más el objetivo final de lograr el ascenso a LaLiga Santander
El cuadro amarillo es más primero que la semana pasada. Con 55 puntos, los de Álvaro Cervera suman tres unidades más que el Real Zaragoza, máximo competidor en la lucha por la primera plaza tras el declive del equipo de Guti. Las sonrisas rebosan también en los entrenamientos, donde se vive una atmósfera envidiable.
Tal es así que cada baja cuenta. Garrido es el único lesionado de la plantilla cadista, por lo que sus jugadores le guardaron una sorpresa en mitad de la sesión. Uno por uno corrieron a abrazarle para darle ánimo hasta armar un bloque de cánticos y alguna que otra colleja.
Como anécdota, uno de los últimos en incorporarse al 'maul' fue Jorge Pombo, que saltó por encima de sus compañeros para abrazar al lesionado. Distribuido el vídeo a través de las redes sociales, el tuit del Cádiz llamó la atención de un aficionado, que vinculó el gesto de Pombo con el legendario juego del 'Mangüiti'.
Muestra de cariño de los compañeros del @Cadiz_CF a @JonGarrido000 único jugador lesionado de la plantilla. pic.twitter.com/3PMRPA8Syi
— Submarino Amarillo (@submarinoOC) March 3, 2020
Pombo resucita el juego del 'Mangüiti'
El 'Mangüiti' es uno de esos pasatiempos que, alejados del día a día, se mantienen vivos en la mente de los habitantes de La Tacita de Plata', los mismos que poblaron las plazas de la ciudad en el pasado.
Una expresión 'gadita' que hace referencia a un juego que consistía en colocar a varias personas en fila, que inclinaban su cuerpo hacia delante formando un largo caballete humano. El blog 'Pasión por Cádiz' lo explica de la siguiente manera:
El equipo contrario saltaba sucesivamente encima de ellos. Habían diferentes estrategias, aunque la más usada era cargar el máximo número de participantes encima de un sólo miembro del equipo contrario, para así hacer que no resistiera el peso.
Inconscientemente, el Cádiz resucitó un juego que aún remueve la nostalgia por las calles de la ciudad, un ejemplo más del vínculo existente entre equipo y afición, el estadio y las calles de 'La Tacita de Plata'.