El regreso del Álvaro García más maduro: una venta necesaria, pero dolorosa
El partido del domingo será el del regreso de Álvaro García a Cádiz. Ya jugó con la camiseta del Rayo Vallecano en el Carranza en la temporada del ascenso del Cádiz CF. Ahora los dos están en LaLiga Santander y su vuelta tiene unas connotaciones. Habrá público en el estadio y seguro que habrá murmullos cuando le llegue el balón a
El utrerano fue traspasado al club madrileño en el verano de 2018 por una cantidad que superó los cinco millones de euros. En su momento fue una gran operación a nivel económico porque era una cifra nada usual en LaLiga SmartBank. Al Cádiz le sirvió para tomar un músculo económico que le ayudó después a dar el salto del ascenso a la máxima categoría.
Fue doloroso despedirse de un jugador que marcaba diferencias y que es muy difícil de encontrar. El Cádiz fue capaz de lograr el ascenso sin él, pero después de varios años buscando un jugador de sus características no lo ha conseguido. Su velocidad y desborde no abundan ya.
Ahora llega en plena madurez, a sus 29 años, asentado en la élite y después de haber renovado hasta 2026. Se ha quedado a las puertas de jugar su primera final por la eliminación copera ante el Betis, pero tiene garantizada su continuidad en el escaparate de una de las ligas más fuertes del continente europeo.
"Es verdad que me debo al Rayo, pero en el futuro nunca se sabe. Siendo sincero, fui muy feliz en Cádiz y nunca podré cerrar esa puerta. Además, soy de Utrera y estoy cerca de mi casa. El fútbol da muchas vueltas y nunca se sabe lo que puede pasar", dijo en una entrevista concedida a ElDesmarque en 2020. Para el cadismo sería una alegría recuperar uno de los jugadores con los que dio el paso de salir del pozo de Segunda B para soñar a lo grande.
