Luis Enrique, ante un estreno que puede suponer un problema

Llega el turno de España en la jornada del miércoles y Costa Rica es el primer rival de los hombres de Luis Enrique en el Mundial. Ante las grandes amenazas de Alemania y Japón, para los españoles es imprescindible ganar en este primer duelo. A priori, el combinado costarricense es el más débil de este Grupo E, por lo que no pueden permitirse pérdidas de puntos que puedan suponer más de un problema.

En un Mundial puede haber sorpresas de todo tipo y hasta la selección más débil puede hacer historia. Ya lo demostró Arabia Saudí cuando le ganó a Argentina en el primer partido de la competición. España no puede permitir que le pase lo mismo, ya que los alemanes no van a perdonar ni un punto. Japón quiere ser la sorpresa de este grupo también y en manos de Luis Enrique está el poder empezar por el camino correcto.

Es cierto que perder el primer partido puede no significar nada. España lo sabe porque ya le ocurrió en Sudáfrica, cuando Suiza venció por 1-0. Aquella selección de Vicente del Bosque acabó ganando el Mundial, por lo que el precedente es bastante positivo. Aunque perder el primer partido aumenta la presión de cara al segundo encuentro. Por ello, ganar evitaría una gran carga a los hombros de los jugadores.

Costa Rica apenas tiene argumentos para poder arrebatarle puntos a España. Es la favorita para quedar en la última posición del grupo, aunque también lo era Arabia Saudí en el Grupo C de Argentina. Un Mundial es capaz de todo, pero eso es algo que España no quiere permitir. La gran prueba estará en la segunda jornada, cuando se enfrenten a los alemanes. Y llevar tres puntos a ese partido puede ser algo muy positivo.

Todos estarán pendientes del debut español en Qatar. La imagen de la selección y su estrategia brillarán por primera vez este miércoles, cuando se puedan comprobar las posibilidades de ganar el campeonato.