Vinicius y De Bruyne lo dejan todo para la vuelta
La Champions League nos tiene acostumbrados a partidos únicos. Pero el que se jugaba entre el Real Madrid y el Manchester City era el foco de todas las miradas. Considerados los dos mejores equipos de la competición, la ida aguardaba un duelo que podía ser un gran paso para la final. El Manchester City salió a dominar con su idea y el Real Madrid, con jugadores como Vinicius y Rodrygo, esperó su momento.
Los hombres de Guardiola salieron a coger el balón y a intentar crear huecos agotando al conjunto blanco. La posesión era tan abrumadora que el murmullo comenzaba a aparecer en el Bernabéu. Además, cuando el City perdía la pelota, la volvía a recuperar enseguida. Los ánimos de los de Ancelotti no cayeron, puesto que sabían que solo les hacía falta una oportunidad para aprovechar sus armas.
Fue Vinicius Junior el que se encargó de eso. En un ataque vertical, cogió el balón por dentro y marcó un gran gol desde fuera del área imposible para Ederson. Cuando mejor estaba el City, el Real Madrid dio un golpe encima de la mesa y descolocó por completo los planes de Guardiola. Aunque el partido estaba lejos de acabarse.
La segunda mitad fue muy distinta, ya que el Real Madrid tuvo más control y más posesión del balón. Pero cuando mejor estaba el Madrid, De Bruyne marcó otro gran gol desde fuera del área para empatar el partido. Un gol rodeado de polémica ya que en una acción anterior el balón había salido del terreno de juego y el colegiado no señaló nada.
Aun así, el partido siguió su curso y terminó con el empate a uno. Este resultado deja favoritismo al Manchester City ya que la vuelta es en su estadio. Pero el Real Madrid plantó cara y no ha dicho su última palabra.