El Palau recibe un clásico con consecuencias europeas

Barcelona y Real Madrid jugarán mañana el partido de la verdad, un encuentro que no será totalmente decisivo, pero que servirá para calibrar las inercias de uno y otro en el clásico por excelencia.

Se juega seguramente más el equipo de Xavi Pascual en el partido, porque después de haber cedido una derrota en casa -Caja Laboral-, los azulgranas no se pueden permitir más errores y menos a estas alturas de competición.
Los barcelonistas suman cinco victorias y cinco derrotas, los madridistas 6-4, pero un triunfo de los catalanes tendría valor doble porque, además, le daría el 'average' favorable, ya que en el partido de la primera vuelta, el Barça ganó con una canasta final de Justin Doellman.
Está pendiente Xavi Pascual de la evolución de Alex Abrines, Juan Carlos Navarro y de Stratos Perperoglou. Parece más clara la presencia del griego, mientras que se mantiene en duda la de los dos escoltas españoles.
Después de la inyección moral que supuso la victoria y, especialmente, la manera en que la consiguió en el último partido ante el CSKA -cinco puntos de Doellman en los últimos segundos-, los barcelonistas saben que se juegan buena parte de sus opciones.
La clasificación del 'Top 16' la encabezan los rusos y el Caja Laboral con 7-3, mientras que el Real Madrid suma 6-4 y el Barça 5-5.
Los barcelonistas, después del partido de mañana, afrontarán dos partidos lejos del Blaugrana (Baskonia y Zalguiris Kaunas) y uno en casa (Brose Baskets).
"No tenemos miedo a nada. Podemos jugar bien o mal, pero ganar tres veces seguidas al Madrid es complicado. El pasado es pasado, pero hemos ganado a dos grandes equipos como Olympiacos y CKSA en los dos últimos partidos en casa y esto es buena señal para nosotros", aseguró el técnico azulgrana.
El escolta Pau Ribas señaló que el equipo azulgrana está en un buen momento. "El partido es crucial para la clasificación. Una victoria nos permitiría afrontar los partidos que nos quedan con más confianza", ha dicho.
La buena noticia para los azulgranas es la recuperación de una buena versión del croata Ante Tomic, su jugador franquicia y que ha recuperado buenas sensaciones en las victorias ante el CSKA de Moscú y Joventut de Badalona en la ACB.