Marczynski, el "granadino" soñador ya conoce la de gloria

El polaco Tomasz Marczynski (Cracovia, 33 años), puso un toque emotivo en la Vuelta a España tras imponerse en la sexta etapa con final en Sagunt. Sus primeras palabras, emocionadas, las expresó en perfecto castellano con acento andaluz. Su historia para convertirse en profesional conmovió a los medios que siguen la ronda española.Carlos de Torres
Pocos sabían que Granada tenía un gran ciclista profesional. Milita en el Lotto Soudal y la función de este "polaco con alma latina" es ser fiel escudero del jefe de filas de turno. Para llegar a ello su historia comenzó a los 18 años, cuando en Polonia le resultaba imposible pasar de juvenil a sub'23.
No había equipos en su país para seguir progresando, así que decidió dejar Cracovia a los 19 años, los estudios en la universidad y meterse en un autobús para irse a España y aceptar un contrato de aficionado en el Telco'm de Navarra.
"Fueron 50 horas de autobús hasta Zaragoza, pasé la noche en la estación y al día siguiente me fui a Pamplona". Allí empezó una aventura que continuó en Italia cuando en 2006 y siendo subcampeón de Polonia el Flaminia le abrió los brazos aún como sub'23.
Su vida ya no conoció respiro. Con cuatro títulos de campeón polaco entre contrarreloj y ruta, pasó en 2009 por el Miche, en 2010 y 2011 corrió en el CCC Polsat de su país, entre 2012 y 2013 en el Vacansoleil, en 2014 volvió al CCC, en 2015 fichó por el Torku hasta que en 2016 recaló en su actual equipo, el Lotto Soudal.
En 2012 un "golpe de amor" cambió otra vez el rumbo de su vida. Una vez más. Había sido top 15 en la Vuelta a España, su resultado estelar.
"Fui a entrenarme a Sierra Nevada. Me encantó el sitio, pero el motivo principal fue el amor. Fui por una chica, me enamoré. Ya voy a hacer cinco años aquí. Me encanta el ambiente de España, de Andalucía, de Granada".
Marczynski se considera un polaco con alma latina y maneja una envidiable filosofía de vida. Lo cuenta con una sonrisa en la boca, con el convencimiento y la seguridad de aquellos que se han ganado la vida con la única herramienta del sufrimiento y el riesgo.
"Me encuentro muy cómodo en Granada. Allí puedo entrenar muy bien, tengo Sierra Nevada muy cerca y la playa también", dice el ciclista de Cracovia, quien halaga la forma de ser "de la gente de Granada y Andalucía".
Asentado en el Lotto Soudal, Marczynski ya sabe sin que nadie se lo cuente lo que es la estabilidad profesional. Por fin tocó la tecla que buscó toda su vida.
"El Lotto Soudal es el mejor equipo en el que he estado. He encontrado estabilidad. No he tenido mucha suerte con mi salud por las lesiones, pero miro atrás y no sé cómo lo hice para encontrar la motivación y las ganas de luchar para volver a este nivel", recuerda.
La bicicleta y el ciclismo son su gran pasión y valora su situación teniendo en cuenta las pruebas que tuvo para superar para llegar a un equipo estable del ProTour
Y es que su filosofía de vida es clara: "Trato de disfrutar cada minuto de mi vida y siempre hay que luchar, siempre hay motivos pafa ello".
Un planteamiento sencillo, pronunciado en castellano granadino y con una sonrisa que barniza una bella historia de lucha por un sueño. Marczynski no solo ganó la etapa de Sagunt, sino también la simpatía de la Vuelta y del ciclismo.