Rins: "Voy a intentar ganar en Montmeló"
El piloto español de MotoGP Àlex Rins (Suzuki) aseguró que el próximo fin de semana intentará, en el Circuito de Barcelona-Cataluña, lograr la segunda victoria de su carrera en la máxima categoría del Mundial de motociclismo.
"A mí me gusta marcarme los objetivos carrera a carrera y, en Montmeló, voy a intentar ganar, aunque seguro que las Honda y las Ducati y también la KTM de Pol Espargaró, que no veas como está andando, me lo pondrán difícil", declaró durante la presentación del Gran Premio de Cataluña, que este año se celebró en la plaza de La Porxada de Granollers.
En el pueblo de los hermanos Espargaró, "el único del mundo que tiene dos pilotos de MotoGP", recordó el presidente del circuito, Vicenç Aguilera, Rins hizo toda una declaración de intenciones.
El barcelonés, que en Austin estrenó su palmarés en MotoGP superando en la última vuelta al mismísimo Valentino Rossi, es tercero en la clasificación general, después ser segundo también en Jerez y lograr dos cuartos puestos en Catar y Mugello.
"La verdad es que siempre sueñas con ganar en categorías pequeñas, pero conseguir una victoria en MotGP es conseguir una victoria en MotoGP", subrayó Àlex Rins, quien sorprendentemente dijo quedarse con el GP de Italia como el mejor de la temporada, "en cuanto a adelantamientos se refiere".
"Me quedo con Mugello, porque fue muy emocionante, con Petrucci, Dovizioso, Márquez y yo dándolo todo en cada curva", afirmó el piloto de Suzuki.
Ésta era la primera vez que la presentación del GP de Cataluña se abría al público, y el escenario elegido fue La Porxada, la plaza del mercado y uno de los lugares más emblemáticos de Granollers, una localidad que 'huele' a gasolina y está situada a escasos kilómetros del trazado barcelonés.
Al acto asistieron los pilotos de Moto3 Sergio García, Alonso López y Albert Arenas y el de Moto2 Xavi Vierge, aunque el protagonismo lo acapararon lógicamente los hermanos Espargaró, jaleados por los varios centenares de asistentes a la puesta de largo en su localidad natal.
Aleix recordó que, "no hace tantos años", La Porxada les había visto "corretear" a él y a su hermano, que ahora compiten a toda velocidad en el Mundial de motociclismo.
"Es superbonito y un orgullo luchar con tu hermano en la elite del motociclismo", reconoció Pol Espargaró, sonriente porque el de hoy era "un día especial" para ambos.
'Polyccio' es décimo en la general, después de haber puntuado en los siete Grandes Premios que se llevan disputados, con una sexta posición en el GP de Francia como mejor resultado.
"Hay que aplaudir el trabajo que KTM está haciendo este año, pero ese trabajo es mérito de Pol, aunque me toca ir por detrás de él y no me gusta mucho", reconoció su hermano Aleix, décimo tercero en el Mundial con una Aprilia que no acaba de funcionar.
"El año pasado KTM iba por detrás nuestro, pero este año somos nosotros los que nos estamos quedando atrás con el desarrollo de la moto, así que no queda otra cosa que seguir trabajando. Toca pelearme, darlo todo y luchar por mejorar la moto", reconoció el mayor de los Espargaró.
En cambio, su hermano vive un momento dulce en el Mundial, aunque recordó que este fin de semana será "complicado" para él, aunque corra en casa, "porque Mugello y Barcelona son dos circuitos que nos cuestan bastante".
En cualquier caso, el menor de los Espargaró empieza a recoger los frutos de un trabajo que empezó hace dos años y medio "cuando la KTM no era nada y no teníamos ni un tornillo" recordó.
Tanto es así, que su compañero de equipo, el francés Johann Zarco no está consiguiendo, ni de lejos, los mismos resultados con el mismo material.
"Es una moto un poco complicada, difícil de llevar. Yo tengo la suerte de estar desde el principio y de haberla hecho crecer, pero no hay que olvidar que Zarco es un piloto acostumbrado a ganar y a hacer podios y que seguro que pronto se adaptará a ella y logrará resultados", finalizó Pol Espargaró.