La gama de Opel Grandland ha sido renovada hasta en el nombre, que ha perdido la X. Y la versión híbrida enchufable no ha sido menos. Esta también luce el nuevo frontal Vizor, mientras que incluye en su interior el futurista panel Pure Panel. No obstante, no por haber mejorado respecto a la versión saliente significa que se haya convertido en un modelo caro. Todo lo contrario. Sigue siendo uno de los PHEV más asequibles del mercado. Sobre todo gracias a las ayudas del Plan MOVES III.
El Opel Grandland en su versión PHEV mide de 4.477 mm largo, 1.609 mm de alto y 1.856 mm de ancho, con una batalla de 2.675 mm y un maletero de 514 litros, ampliables hasta los 1.652 l. Un modelo que destaca por su diseño renovado, su comportamiento y confort en la marcha, la eficiencia de su bloque mecánico y su completo equipamiento de serie. Y que compite con modelos como el Toyota RAV4 PHEV o el Peugeot 3008 Hybrid.
Así es el Opel Grandland de acceso a la gama PHEV
La gama PHEV empieza con un bloque híbrido configurado por un motor de gasolina turboalimentado 1.6 Turbo que desarrolla 130 CV de potencia y 200 Nm de par máximo, y uno eléctrico de 110 CV y 320 Nm de par. El motor eléctrico se alimenta de una batería de iones de litio que permite recorrer hasta 65 km en modo totalmente eléctrico. Y en conjunto arrojan 224 CV de potencia y 360 Nm de par máximo.
Todo ello está gestionado por un cambio de marchas automático de 8 relaciones y un sistema de tracción delantera. Y registra un consumo medio de 2 litros cada 100 km.
Equipamiento y oferta para el Grandland PHEV
En equipamiento incluye el acabado Bussiness Edition. Y ya incluye elementos como:
Todo ello tendría una tarifa de acceso de 42.425 euros. Sin embargo, Opel lo promociona en su página web por 39.550 €. Un precio al que le puedes restar otros 5.000 euros si cumples con las ayudas del Plan MOVES III, con lo que te lo llevas por 34.550.
Además, según portales especializados como quecochemecompro.com puede ser tuyo desde 30.200 euros si financias la compra.