En los últimos días se han producido muchas lluvias en España. Y ello hace que sea un buen momento para hablar de uno de los mayores causantes de accidentes cuando a meteorología es lluviosa. Estamos hablando del aquaplaning.
El aquaplaning es lo que ocurre cuando, en una carretera mojada, nuestro coche pierde adherencia con el asfalto y este flota por encima de un charco, lo que hace que perdamos casi por completo el control del vehículo. Esto se produce cuando el neumático no tiene la presión adecuada o está desgastado, siendo incapaz de evacuar el agua de forma suficiente y segura.
Según la Dirección General de Tráfico, el riesgo de accidente aumenta en un 70% cuando llueve. Y muchos de estos accidentes se producen cuando el coche pierde agarre en la carretera.
En caso de encontrarte en una situación de aquaplaning, existen tres recomendaciones que debemos tener en cuenta y que, si seguimos a rajatabla, reducirá en gran medida el riesgo de accidente.
El #acuaplaning 💦 🚗se produce cuando hay agua en la calzada y el neumático pierde agarre y se desliza.
Para evitarlo👇
▶️ Revisa tus neumáticos, a más desgaste o falta de presión, más riesgo.
▶️ Reduce la velocidad.Si se produce, sigue estos consejos 👇 pic.twitter.com/NtJB9wB6ML
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) September 14, 2021
Lo primero que debemos evitar es acelerar. Aunque tampoco debemos frenar de golpe. Es decir, debemos soltar el acelerador suavemente.
Muchos conductores buscan pasar más rápido por encima de charcos, pero ello no hace más que aumentar el riesgo de generar aquaplaning. Si vamos más despacio daremos más tiempo al neumático para que evacúe el agua. Aunque si frenamos de golpe, lo único que conseguiremos es derrapar con las consecuencias que ello puede traer.
En caso de que ya nos encontremos en medio del efecto del aquaplaning, debemos mantener firme el volante. No hacerlo puede provocar que cambie la trayectoria del coche y nos salgamos de la carretera cuando recupere la adherencia.
En tercer lugar debemos evitar movimientos bruscos en el volante. Mover las ruedas solo hará que los neumáticos tarden más en recuperar la adherencia.