BYD continúa su avance imparable en la industria del vehículo eléctrico, consolidándose no solo como el mayor vendedor de coches enchufables a nivel global, sino también como un referente en tecnología e innovación. Ahora, la compañía china ha lanzado un desafío directo a Tesla con su nueva tecnología de conducción autónoma, llamada "God’s Eye", que promete democratizar esta funcionalidad en toda su gama de vehículos.
Actualmente, BYD cuenta con un equipo de 110.000 ingenieros, de los cuales 5.000 están dedicados exclusivamente al desarrollo de conducción autónoma. Esta inversión masiva en investigación y desarrollo demuestra que la compañía no solo quiere competir con Tesla, sino que busca liderar la revolución tecnológica en el sector. Y con el sistema "God’s Eye" estamos ante uno de sus inventos más avanzados.
La marca china ofrecerá su tecnología de conducción autónoma de manera gratuita en sus modelos. Esta estrategia representa un golpe directo para Elon Musk, ya que pone en jaque su modelo de negocio basado en la venta de software como servicio. Y es que hay que recordar que el sistema FSD (Full Self-Driving) de Tesla tiene un coste adicional de 7.500 euros en Europa.
El sistema "God’s Eye" se basa en una arquitectura avanzada denominada Xuanji y estará disponible en tres niveles diferentes:
A pesar de que el nivel más básico no tendrá la capacidad de conducción autónoma en autopista como los niveles superiores, sí contará con funciones avanzadas como estacionamiento remoto desde el móvil y adelantamiento autónomo en carretera. Además, el sistema podrá conectarse con la inteligencia artificial DeepSeek, una de las más avanzadas de China.
Con esta nueva apuesta, BYD podría cambiar las reglas del juego en el mundo de la conducción autónoma, poniendo a Tesla contra las cuerdas y obligándolo a replantear su estrategia de software de pago. La batalla por la movilidad del futuro está más reñida que nunca.