El Toyota que arrasa en medio mundo, pero que fracasa en España
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Puede que en España no arrase, pero en medio mundo es el rey del camino
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Imagina lo mejor del Toyota RAV4, misma calidad, igual, pero más barato
El Toyota Hilux es, sin discusión, uno de los vehículos más exitosos del planeta. Un todoterreno con alma de trabajador que lleva décadas conquistando mercados gracias a su resistencia, fiabilidad y carácter indestructible.
Donde muchos modelos no aguantan las carreteras rotas o los climas extremos, el Hilux sigue adelante sin pestañear. Es el coche más vendido en nada menos que 31 países, desde África hasta Oceanía. Sin embargo, y aunque su fama es mundial, en España es un absoluto desconocido para la mayoría de conductores.
Este Toyota es el coche más vendido en 31 países
El Hilux reina en países tan diversos como Benín, Bolivia, Camerún, Chile, Congo, El Salvador, Guatemala, Guinea, Honduras, Iraq, Malawi, Mozambique, Namibia, Nicaragua, Níger, Nigeria, Nueva Caledonia, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, República Democrática del Congo, Senegal, Seychelles, Sudáfrica, Tailandia, Turkmenistán, Uganda, Yemen, Yibuti y Zambia. En todos ellos, el pick-up japonés es el número uno en ventas, por delante de turismos, SUV y compactos. En África, por ejemplo, se le considera una herramienta esencial tanto para el trabajo agrícola como para el transporte diario. En países como Chile o Paraguay, su fiabilidad en terrenos difíciles lo ha convertido en un auténtico icono nacional.
Parte de su éxito se debe a una mecánica sin complicaciones. El motor diésel de 2.8 litros y 204 CV, la tracción 4x4, su capacidad de carga de una tonelada y su chasis reforzado lo hacen ideal para climas extremos y carreteras inexistentes. Además, ofrece caja automática o manual, y un interior cada vez más sofisticado, con pantalla táctil, Apple CarPlay, climatizador y asistencias de conducción. Es un vehículo que combina la rudeza de un todoterreno con la comodidad de un SUV moderno.
El Hilux no es el único Toyota que lidera mercados
En el otro extremo del mundo, otros modelos también triunfan. El Dacia Duster, por ejemplo, es el favorito en Cabo Verde, Islandia, Madagascar, Moldavia o Ucrania, gracias a su precio ajustado y su espíritu aventurero. El Tesla Model Y domina en Bélgica, Noruega o Suiza, impulsado por su eficiencia eléctrica. En España, el más vendido es el Dacia Sandero, un coche práctico y barato que poco tiene que ver con el carácter robusto del Hilux.
Mientras tanto, Toyota también impone su sello en otros segmentos. El Land Cruiser 300 es líder en países como Kuwait, Omán o Qatar, donde el lujo y la capacidad todoterreno se combinan. El RAV4, más civilizado y urbano, manda en Estados Unidos, Costa Rica y Lituania, demostrando que Toyota sabe adaptarse a todos los mercados.
En España, sin embargo, las cosas son distintas. Con 1,18 millones de coches matriculados en 2024, el comprador medio busca eficiencia, etiqueta ECO y bajo consumo, no un pick-up diésel pensado para cruzar desiertos. Por eso, el Hilux queda relegado a un nicho profesional o agrícola, sin posibilidad de competir con los SUV híbridos que dominan nuestras calles.
Recibí mi Hilux VXL Milhibrid la semana pasada en España. Pagué 750.000 euros, incluyendo intereses del préstamo, por un vehículo con tapicería de tela, asientos manuales limitados en movimiento e incómodos, sin reposabrazos a la altura del volante, una multimedia muy pobre con una cámara de marcha atrás de mala calidad y sin trazado de giro, y sin cámaras 360, que se hacen imprescindibles para un vehículo tan largo y alto. Además, carece de detalles en la caja como luces o enchufe, tiene anclajes de carga pobres, no avisa del ángulo muerto en los retrovisores, no tiene cierre automático de espejos y ventanillas, ni cierre centralizado en el portón trasero, y lleva frenos de tambor traseros. Para colmo, cuando la compré hace 8 meses, @Toyota_Esp en su página web no informaba de su equipamiento y carecía de configurador de opciones y accesorios. ¿Quién va a despilfarrar semejante suma de dinero sabiendo todo esto? En fin, espero que al menos su fiabilidad sea cierta.