El nuevo BMW es, para la mayoría, el más atractivo de la marca
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El nuevo X2 se ha ganado muchos aplausos
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BMW sigue apostando por diseños top
La nueva generación del BMW X2 introduce un cambio de enfoque notable respecto a su predecesor, consolidándose como una de las propuestas más atractivas del catálogo actual de la marca. Su diseño exterior abandona las proporciones compactas del modelo anterior para adoptar una silueta más marcada de SUV coupé, con mayor longitud y una presencia más imponente. Con 4,55 metros de largo y una mayor altura libre al suelo, el nuevo X2 presenta una estética decididamente más deportiva y sofisticada.
El frontal destaca por la parrilla de grandes dimensiones con contorno iluminado, elemento que refuerza su personalidad visual y lo diferencia del resto de modelos de la gama. También se ha potenciado la aerodinámica con trazos laterales más definidos y un pilar trasero que acentúa el perfil descendente típico de un coupé. Llama especialmente la atención cómo este lenguaje de diseño busca un equilibrio entre elegancia y agresividad sin caer en excesos estéticos innecesarios.
El interior mantiene esa coherencia estilística, con un salpicadero dominado por una pantalla curva que integra el cuadro de instrumentos y el sistema multimedia. La disposición de mandos ha sido simplificada, priorizando la digitalización y la conectividad, aunque sin renunciar a la ergonomía clásica de BMW. La calidad de acabados y el espacio disponible permiten al nuevo X2 competir con modelos de segmentos superiores, y el maletero de 560 litros refuerza su funcionalidad dentro del segmento SUV compacto.
Versatilidad mecánica y posicionamiento de gama
En términos mecánicos, el BMW X2 amplía su oferta para responder a perfiles diversos. Desde versiones básicas con mecánicas eficientes hasta variantes deportivas como el M35i xDrive con 300 CV, el modelo permite elegir entre un enfoque racional o claramente prestacional. En este sentido, cabe destacar que el comportamiento dinámico se ha afinado para ofrecer una conducción más firme y precisa, especialmente en las versiones con suspensión adaptativa.
Los precios parten de algo más de 47.000 euros y pueden superar los 70.000 en las configuraciones más equipadas. Por todo ello, el nuevo X2 no solo representa una evolución formal respecto al modelo anterior, sino también una redefinición de su posicionamiento: ahora más exclusivo, más visualmente atractivo y con un abanico de opciones que refuerzan su versatilidad dentro de la oferta de BMW.