Enfermedad de Lyme: en qué consiste la grave infección de Romina Belluscio, presentadora y mujer de Guti

Romina Belluscio sufre la enfermedad de Lyme. La mujer de Guti lo ha desvelado a través de una publicación en su cuenta de Instagram asegurando que lo padece desde hace tres años, pero ¿en qué consiste esta enfermedad?

Es una infección bacteriana que se transmite a través de la picadura de una garrapata infectada, define el departamento de salud de Nueva York. Aunque puede causar serios problemas de salud, si su diagnóstico es temprano y se administran antibióticos a tiempo, la enfermedad se puede curar rápidamente y por completo.

La enfermedad de Lyme puede pasar por tres etapas muy diferenciadas, en función de la evolución de la patología: etapa temprana localizada, etapa temprana generalizada y etapa tardía. En cada uno de las fases los síntomas varían, además, entre la etapa precoz y la tardía se suele producir un periodo asintomático, según señala el Manual MSD.

La enfermedad de Lyme en la etapa temprana localizada

Los síntomas de la primera etapa de la enfermedad de Lyme suelen aparecer entre los 3 y 32 días después de la picadura de la garrapata. Según el Manual MSD y Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades suelen aparecer sarpullidos en el lugar de la picadura en el 75% de las personas.

La mancha roja suele aumentar su tamaño progresivamente hasta los 50 centímetros, con una zona clara en el centro. Al tocarlo puede sentirse calor, pero rara vez causa picazón o dolor.

Síntomas en la etapa temprana generalizada

Estos síntomas pueden empezar días o semanas después de la aparición de la primera erupción y persisten durante meses aunque de forma intermitente. Entre los síntomas más frecuentes el manual destaca:

• Fiebre y escalofríos.
• Dolor de cabeza.
• Fatiga y cansancio.
• Dolores musculares.
• Dolor e hinchazón en las articulaciones.
• Rigidez en el cuello.
• Manchas de menor tamaño por otras partes del cuerpo cuando no se recibe tratamiento.

Entre los síntomas menos frecuentes se sitúan:

• Ganglios linfáticos inflamados.
• Dolor de espalda y de garganta.
• Nauseas y vómitos.
• Aumento del tamaño del bazo.

Además de estos síntomas, que en ocasiones suelen confundirse con gripe u otras infecciones víricas, el 15% de los casos desarrolla meningitis -inflamación de las capas de tejido que cubren el encéfalo y la médula espinal- y parálisis de Bell -debilidad en un lado, o en ambos, de la cara-.

Ciertos problemas cardiacos, tales como arritmias e inflamación del tejido cardiaco o del saco que envuelve al corazón, se desarrollan en el 8% de las personas infectadas.

Enfermedad de Lyme: síntomas de la fase tardía

Cuando la enfermedad de Lyme no se diagnostica en la fase precoz, meses o años después pueden aparecer otros problemas más graves como:

• Artritis, al cabo de varios meses.
• Episodios de hinchazón y dolor en las articulaciones, sobre todo en las rodillas.
• En las rodillas se tiene más hinchazón que dolor y se notan calientes e incluso a veces enrojecidas. Detrás de estas pueden aparecer quistes.
• Inadecuado funcionamiento neurológico, en un pequeño número de casos.
• Alteraciones en el estado de ánimo, el habla, la memoria y el sueño.
• Hormigueos y dolores en la espalda, piernas y brazos.

Diagnóstico y tratamiento de la enfermedad de Lyme

La analítica de sangre y, a veces, la punción lumbar -análisis de una muestra de líquido articular o líquido cefalorraquídeo- son las pruebas que utilizan los médicos para diagnosticar la enfermedad de Lyme.

Además de los resultados de dichas pruebas, tienen en cuenta los síntomas y las erupciones, la posibilidad de haber contraído la enfermedad en cuanto a la zona donde vive o haya viajado recientemente la persona infectada.

El tratamiento para la enfermedad de Lyme, independientemente de la etapa en la que se encuentre la persona infectada, es a través de antibióticos. Si se diagnostica de manera precoz, la respuesta que dan los antibióticos es mucho más eficaz y evitan complicaciones más graves.

Cómo prevenir la enfermedad de Lyme

Siempre que una persona haya estado expuesta a garrapatas debe explorar su cuerpo diariamente por si esta estuviera adherida a su piel, teniendo en cuenta que para transmitir la enfermedad de Lyme tienen que estar adheridas más de un día y medio.

Además, para evitar la picadura de las garrapatas, el manual propone lo siguiente:

• No salirse de los caminos y senderos cuando se camine por zonas boscosas.
• Caminar por el centro del camino para evitar rozar arbustos y maleza.
• No sentarse en el suelo o en paredes de piedra.
• Vestir camisas de manga larga.
• Usar pantalones largos y cerrarlos por debajo metiéndolos en las botas o los calcetines.
• Usar ropa de colores claros, para así distinguir mejor las garrapatas.
• Aplicar un insecticida específico sobre la piel.
• Aplicar un repelente en la ropa.

Cuando se detecta la presencia de una garrapata adherida en la piel, la mejor forma para quitarla es con una pinzas puntiagudas. Se debe agarrar a la garrapata por la cabeza y tirar gradualmente para que salga entera y que no se quede ninguna parte adherida.

No debe apretarse ni aplastarse, así como tampoco utilizar vaselina, alcohol, cerillas encendidas ni otros irritantes.

Si se acude al médico por una picadura de garrapata, el facultativo valorará si administra un fármaco para prevenir el desarrollo de la enfermedad de Lyme o le observa periódicamente para administrar antibiótico sólo si hay síntomas.