Si fumas antes de hacer deporte deberías saber esto: aumenta el riesgo de padecer un episodio cardiaco
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El tabaco y el ejercicio físico son dos actividades incompatibles
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Al inhalar monóxido de carbono no llega bien el oxígeno a los órganos y músculos
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El ejercicio físico ayuda a dejar de fumar
El tabaco y el ejercicio físico son dos actividades incompatibles, e incluso contraindicadas. Esto significa que si practicas deporte y eres fumador estás poniendo en juego tu salud, y más aún si lo haces justo antes de empezar a entrenar.
Es fácil que esta situación se dé -la de ser fumador y practicar algún deporte-, teniendo en cuenta que el tabaco es la segunda sustancia psicoactiva más consumida en España entre la población de 15 y 64 años, según la última Encuesta sobre Alcohol y Otras Drogas en España (EDADES).
Sumado a esto, en los últimos años han entrado en escena los vapeadores, cuestión por la que muchos médicos están realmente preocupados ya que es la puerta de entrada de muchos jóvenes al tabaco.
Fumar antes o después de ir al gimnasio o mientras esperas a que lleguen tus amigos para jugar una pachanga de fútbol son actos que muchos fumadores hacen pese a que están poniendo en riesgo su salud.
¿Qué pasa si fumo antes de hacer deporte?
Para conocer en profundidad qué le sucede a nuestro organismo cuando fumamos, tanto tabaco como vaper, antes de un esfuerzo físico hemos preguntado en ElDesmarque al Dr. Carlos Rábade, coordinador del Área de Tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
"Al fumar inhalas monóxido de carbono, perjudicando a la oxigenación tanto de los órganos como de los músculos y aumentando el riesgo de padecer un evento cardiaco o respiratorio", explica el neumólogo.
Si ya de por sí el corazón y los pulmones se exponen a un esfuerzo al hacer deporte, al sumar esta inhalación de monóxido, este esfuerzo aumenta considerablemente por lo que todo el organismo a largo plazo se va a resentir aumentando el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular o respiratoria.
"Con el paso de los años, el fumador se va a notar más limitado a la hora hacer tanto ejercicios de fuerza, de resistencia como de potencia y probablemente al verse con tantas dificultades acabe abandonando la práctica deportiva y apostando por una actividad sedentaria", argumenta.
El ejercicio físico ayuda a dejar de fumar
En lugar de que ocurra la situación anterior, el neumólogo motiva a que estas personas dejen de fumar ya que retroalimenta los beneficios del ejercicio físico. "A las horas de dejar de fumar ya mejora la frecuencia cardiaca y el oxígeno llega mejor a los órganos", asegura el miembro de SEPAR.
Otros de los beneficios de dejar de fumar respecto a la práctica deportiva son:
- A las horas mejoran los parámetros cardiacos.
- A las 12-24 horas se elimina la nicotina y otros componentes tóxicos.
- A las 24-48 horas se reducen los niveles de monóxido de carbono.
- A la semana ya se empieza a notar que la capacidad pulmonar y la percepción de dificultad respiratoria con el ejercicio físico son menores, es decir, una mayor tolerancia al esfuerzo.