Los expertos conciencian sobre los divertículos: una afección frecuente a partir de los 50 años y que está infradiagnosticada

Con la edad, la salud va haciendo mella, por ello la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) ha organizado la "Adelántate y cuida tu colon" para llamar a la concienciación sobre los divertículos, una enfermedad en muchos casos no diagnosticada que puede derivar en complicaciones muy graves para la salud y que, en caso de padecerla, se mejora con la detección temprana.

El principal motivo por el que la FEAD ha organizado dicha campaña es porque el 40% de la población mayor de 50 años los tiene, pero tan sólo el 20% padece síntomas que le lleven al diagnóstico. Los divertículos son pequeñas bolsas o sacos que sobresalen en puntos débiles del colon, lo que aumenta su riesgo de sufrir sangrado complicaciones, infecciones e incluso perforación intestinal.

Estos representan la enfermedad más frecuente del colon y su prevalencia se incrementa con la edad. "A los 50 años hasta el 40% de la población puede tener divertículos sobre todo mujeres, el 50% en mayores de 60 años y a los 80 años hasta el 70% la padece. Es menos frecuente en menores de 40 años (5%), en este grupo etario afecta sobre todo a varones y obesos con mayor riesgo de complicaciones", evidencia la FEAD. Ante este motivo, los especialistas recomiendan, ante la sospecha o padecimiento de molestias, acudir al médico para confirmar la posibilidad de enfermedad diverticular.

¿Qué son los divertículos?

Se caracterizan por la formación de pequeñas bolsas o sáculos que salen del interior del intestino hacia el exterior a través de la capa muscular del colon y aparecen por el aumento de presión dentro del intestino grueso, una patología frecuentemente relacionada con la obesidad y sedentarismo debido a una dieta baja en fibra y rica en carbohidratos refinados.

Aunque el 75% de los casos de enfermedad diverticular no suele generar complicaciones y puede controlarse con un tratamiento médico basado en antibióticos, dieta y analgesia, el 25% restante puede presentar diversas complicaciones para las cuales el tratamiento requiere una intervención quirúrgica.

Estas complicaciones, recuerdan los expertos en aparato digestivo, pueden ser: abscesos, fístulas, obstrucciones o bloqueo del tránsito del colon, peritonitis o sepsis, entre otros.

Los síntomas que activan las alarmas

Entre los síntomas más frecuentes a la hora de padecer diverticulitis figuran las molestias o el dolor abdominal en el lado izquierdo, la distensión abdominal -cuando el vientre se siente lleno y apretado-, gases, estreñimiento o cambios en el ritmo intestinal.

"Son síntomas que afectan a la calidad de vida de quien los padece, de ahí la importancia de identificarlos y visitar al especialista para confirmar la posibilidad de enfermedad diverticular", señala la FEAD.

Diverticulitis, una de sus complicaciones

Cuando un divertículo se inflama se produce una diverticulitis. "Esto ocurre cuando hay un adelgazamiento o pequeña rotura de la pared del divertículo y puede producirse por un aumento de la presión en el colon por heces o gas, o por pequeños restos de heces duras que quedan atascados dentro del divertículo conocido como "fecalito" ", explica la FEAD.

Los síntomas de dicha afección varían en función del grado de inflamación. El más común es el dolor en la parte baja e izquierda del abdomen similar al de una apendicitis -pero en el lado contrario-, fiebre, escalofríos, náuseas y vómitos, estreñimiento o diarrea. Si la inflamación evoluciona se puede producir un empeoramiento grave del estado general.