"Era mi era mi sueño. No podía terminar mi carrera sin venir aquí…Perdí mi sitio, luego mi confianza, luego mis ganas. Pasé de ser duro contra tipos que me arrancaban la rodilla a levantarme de la cama, lesionado. Me hubiera gustado entender por qué, pero no podía…", reconoció por entonces.
"La gente lucha cada día, y no tengo derecho a quejarme, ni siquiera cuando no jugaba, ni siquiera cuando estaba lesionado, diciendo ‘la vida es una mierda’. Yo no podía hacer eso. Me dolía, pero por otro lado...", analizaba el exfutbolista solamente unos meses atrás sobre su paso por el Santiago Bernabéu y lo contraproducente que fue para el final de su carrera.

El belga analizó por entonces su último etapa de su carrera, mermada por las lesiones y la falta de continuidad. "Esto demuestra que el Madrid es más grande que cualquier otra cosa. Es complicado jugar allí…Quizá necesitaba entrenar más. También tuve las lesiones equivocadas en los momentos equivocados. La operación, la placa, el encierro. Vuelvo, me duele, me fuerzo. Llega Ancelotti. Buena preparación, juego bien. Pero mi cuerpo, el dolor, las lesiones...", expresó.
Al belga también se le ha podido ver recientemente subido a la bicicleta. El pasado mes de abril, al belga se le pudo ver completar la Gran Fondo de la Mallorca 312, una prueba popular en la isla balear.