Alcaraz Yáñez impide la resurrección del Xerez

Redacción III MairenaUn día es por un motivo y otra semana, por otro. Lo cierto es que el Xerez acumula ya 13 partidos sin ganar, aunque en Mairena mereció mejor premio. Y no lo tuvo, sobre todo, por un grave error del colegiado Alcaraz Yáñez, que no pitó una clara falta a favor de los azulinos segundos antes del decisivo 2-1. Otro palo, y de los gordos, para un equipo que parecía resucitar con el gol de Pedro, pero que de nuevo sigue metido en la miseria y con un futuro poco alentador por delante.

No fue el típico partido que el Xerez viene demostrando en las últimas semanas. Más serio en defensa y más envalentonado en ataque, ante un rival nervioso y que no quería ser el primero en caer frente a este rejuvenecido Xerez. Debutó Lucas, que dejó buenos detalles, pero no fue suficiente para volver a casa con una sonrisa.
Una derrota que mantiene a los azulinos en zona de descenso, aunque en el Nuevo San Bartolomé quedó patente que los chavales tienen vida. Higuera, con su futuro en el aire, continúa sin conocer la victoria y esta vez incluso fue expulsado.

El partido fue de igual a igual, con un Mairena tranquilo en la tabla y a la espera de cerrar su salvación matemática. A los de Alonso Ramírez les costó más de lo esperado sorprender al rival, que no hubiera caído de no existir ese error del colegiado ya en el último minuto del encuentro. Porque el Xerez se ató los machos y peleó como pocas veces. Hasta que lo hundieron. Pedro puso un ilusionante 0-1 en el marcador antes del descanso, pero se quedó en eso, ilusión.
Porque el Xerez no mató y al final lo mataron. Entre el empuje del Mairena y la actuación del árbitro. Lebrón empató con un golazo por la escuadra y el ida y vuelta que se convirtió el choque en la recta final, los azulinos claudicaron. En esta ocasión sin tener fallos. Alcaraz Yáñez no pitó una clara falta a Emilio, el Mairena montó la contra e Ito hurgó en la herida del Xerez. Hubo resurrección, pero al final volvió a caer como siempre.