Abelardo: "Si sube, el ejemplo para el Sporting puede ser la Real Sociedad"
Campeón olímpico en los Juegos de Barcelona y 54 veces internacional con España -selección con la que disputó dos Mundiales y dos Eurocopas- Abelardo Fernández triunfó en el FC Barcelona tras hacerlo en el Real Sporting de Gijón, su equipo de origen, al que ahora entrena y con el que apunta al ascenso a Primera División tras una temporada plagada de contratiempos.Adrian R. Huber
En una entrevista con la Agencia EFE que tuvo lugar en la Escuela de Fútbol de Mareo, Abelardo comentó diversos aspectos relacionados con su trayectoria deportiva, antes como jugador y ahora como técnico.
Pregunta: El alumno es impecable, hace muy bien los deberes, trabaja a tope y sin embargo, aún no se sabe si lo van a admitir en la universidad. ¿Cómo se siente?
Respuesta: (ríe) No sé como explicarlo, porque el año está siendo espectacular. Nadie pensaba que iba a pasar esto, con todo lo que está sucediendo alrededor del equipo. Y no es normal tener 79 puntos y no depender de ti para subir (de forma directa).
Más aún, con las dificultades que pasamos desde principios de año, sin poder fichar; también a nivel económico, dentro del club, y a nivel social, con las protestas que ha habido en El Molinón contra el Consejo de Administración durante la primera vuelta y gran parte de la segunda... pero el equipo se ha repuesto a todo.
Ahora toca pelear hasta el final. Si no es ascenso directo, por la promoción. Pero este equipo, este grupo, merece estar en Primera.
P: Es profeta en su tierra. Lo quiere todo el mundo. Tiene detrás a toda una ciudad que, además, es la suya. Es gratificante, ¿no?
R: Sí. Es emocionante. Mis amigos y mi familia me lo dicen. Estoy disfrutando como nunca, pero creo que no como debiera. Todos me animan a disfrutarlo más, porque este equipo está haciendo historia y eso que nadie daba un duro por él... Creo que valoraré más todo cuando esto acabe, quedemos como quedemos. Con ascenso o sin él.
Lo que hemos vivido este año, con todas esas dificultades, y esa comunión con la afición, ese 'ambientazo' en El Molinón... no lo había desde la época de Manolo (Preciado). El año pasado lo dije en mi primera rueda de prensa: que quería que la gente recuperase el sportinguismo. Y creo que lo hemos conseguido. Para mi es un orgullo. Y, siendo de Gijón, me emociona.
P: El club hizo de una carencia una virtud. Se volvió a mirar más hacia la cantera. ¿Cree que quienes deben tomar nota lo han hecho?
R: Yo creo que sí. Yo hablo mucho con Javier Fernández (máximo accionista del Consejo y vicepresidente del club). Creo que, evidentemente, el club ha cometido muchos errores. Si no, no se hubiera llegado a esta situación. Pero todos cometemos errores. Y creo que de los errores se aprende.
El Sporting todavía puede remontar. Lo ideal sería ascender, no te voy a engañar. Si ascendemos, haciendo las cosas medianamente bien, este equipo tendría que estar asentado en Primera división.
Y la base creo está aquí. Pero no porque sea yo. Cualquier entrenador que venga tiene que mirar para Mareo. ¿Por qué? Porque el Sporting no puede pagar ningún traspaso. No somos el Barca o el Madrid, que pueden gastar 20 o 30 millones de euros en un jugador.
Aquí tenemos que fichar a gente que acabe contrato, acertar; y unirlos a los que sean de aquí, los que fabriquemos en Mareo, en estas instalaciones. Tendremos que trabajar muy bien. Pienso que, aún subiendo, el Sporting no tendría que hacer muchos fichajes. Hay que mantener el bloque. Y disfrutar.
P: Si sube a este equipo, después de tantos contratiempos, ¿le darán poder absoluto en el área deportiva?
R: No hemos hablado de ese aspecto para nada. Cuando acabe la temporada, pase lo que pase, hablaré con Javier (Fernández). Yo creo que se tienen que cambiar cosas. Y él lo sabe. Luego, a lo mejor soy yo el equivocado. Pero cosas habrá que cambiar. Es un asunto que aún no hemos tocado. A Javi le he pedido que me deje estar centrado ahora en el equipo. Cuando acabe la temporada hablaremos.
P: Pero si sube al equipo se lo habría ganado, ¿no?
R: Lo importante es que haya comunicación y trabajo en equipo. Yo creo que tiene que haber un director deportivo que debe estar por encima del entrenador. Yo no puedo ser el jefe en lo deportivo, porque creo que el Sporting tiene que estar por encima de cualquier entrenador o de cualquier director deportivo.
El director deportivo tendrá que decidir quién es el entrenador; y decidir junto a él qué jugadores tienen que venir. Y decidir qué baremos marcar en lo que se refiere a quién y por cuánto debe venir.
Yo no puedo volverme loco como entrenador y traer pivotes en vez de centrales. O traer cinco delanteros. Si tenemos a Guerrero y a Castro, traemos uno o dos. Hay que tener coherencia y comunicación. Este año hemos vuelto a recuperar al filial. 'Tommy' (Tomás Hervás, técnico del Sporting B) y yo tenemos una gran relación, no sólo por ser amigos. Y eso que le he hecho una gran faena, porque le he 'quitado' muchos futbolistas (ríe). Pero es que tiene que haber una unidad de criterio. También con el juvenil A, con el B, los cadetes. Con todos: una misma idea, desde el primer equipo hacia abajo.
P: Usted jugó en Europa con el Sporting. ¿Es una utopía pensar en volver a ver al Sporting en Europa? ¿Sería una locura?
R: Primero hay que ir paso a paso. Creo que si se sube a Primera se puede hacer. Creo que el ejemplo nuestro puede ser la Real Sociedad. La Real ascendió con una base de jugadores de su cantera, de Zubieta. Bien es cierto que luego vinieron los (Antoine) Griezmann, los Carlos Vela, los 'Chory' Castro, los (Claudio) Bravo... Creo que eso puede ser el espejo del Sporting si asciende. Chavales de la cantera y traer tres, cuatro o cinco jugadores que suban ese nivel y que ayuden al Sporting a no pasar problemas.
P: Hay paralelismos. Usted, cuando empezaba, recibió la confianza de García Cuervo y ahora se la da a los jóvenes. En el Barcelona no contaba para Van Gaal y revirtió la situación; y ahora ha confiado en Isma López, con quien al principio dijo que no contaba
R: Es que aprendí de esta gente. Aprendí de García Cuervo y de Ciriaco. A ellos les daba igual el carné de identidad. Miraban el rendimiento. Y Van Gaal también. Me dijo eso, pero a su vez fue justo. Me lo gané y me puso. No se 'encabezonó', aunque tuviera esa imagen. En tres años que estuve con él fui el defensa que más minutos tuvo con él. Y después me lo agradeció.
Con Isma, que es el ejemplo más claro, hablé al principio de temporada. Yo lo veía en una posición en la que había jugadores que iban por delante de él. Y después me planteé, al tener sólo un lateral izquierdo, Alex (Menéndez), hablándolo con Iñaki (Tejada, segundo entrenador) nos planteamos mejorarlo defensivamente, para ver si teníamos un lateral. Lo hemos reconvertido. Pero él se lo ha ganado. Yo no le regalé nada a Isma, él se lo ganó entrenando.
P: Por cierto. ¿Cree que Van Gaal volverá a hacer campeón al Manchester United?
R: Sí, sí. Es un grandísimo entrenador. Es de los técnicos que, según pasan los años, yo más valoro. Muy buen entrenador. En Barcelona no acabó de calar porque no tuvo muy buena relación con la prensa y no caló entre la gente. Pero ganamos muchas cosas con él. Ganamos Ligas, Copas del Rey y Supercopa de Europa. Solo nos faltó ganar la 'Champions'. Llegamos dos veces a semifinales, pero no lo conseguimos.
Van Gaal llegó en el 97 y fue el primer entrenador moderno. El primero que empezó a cortar los vídeos, que analizaba al rival en profundidad. Trajo una escuela de fútbol muy avanzada, igual que (Johan) Cruyff. Te exigía mucho. Estaba siempre encima de ti. EFE.