Una Juventus de récord
La Juventus Turín llegó al segundo parón para los compromisos de las selecciones con números de récord, al haber ganado los diez partidos disputados, ocho en la Serie A italiana (Primera división) y dos en la Liga de Campeones.
El autoritario triunfo por 2-0 conseguido el último sábado en el campo del Udinese, en la octava jornada de la Serie A, permitió a los turineses seguir con el pleno de puntos en este arranque de temporada, e igualar una marca que la 'Vecchia Signora' solo había logrado tres veces anteriormente, en 1930, 1985 y 2005.
La Juventus, rival europeo del Valencia, marcha lanzado en el campeonato doméstico y en menos de dos meses de competición ya cuenta con seis puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, el Nápoles del técnico Carlo Ancelotti.
La diferencia de calidad ha sido hasta este momento evidente. El gran arranque permitió a los turineses dejar muy atrás en la tabla a equipos como el Inter de Milán (8 puntos) o la Roma (10), que encaraban esta campaña con el objetivo de mantenerse en la pelea por el título.
Con el portugués Cristiano Ronaldo como líder absoluto, el conjunto turinés no concedió prácticamente nada a sus rivales, y empezó de la mejor manera la carrera hacia la consecución de su octavo título liguero consecutivo.
Sólo tres precedentes en su historia
En los 119 años de historia del Juventus, solo tres veces se registraron números parecidos. Fueron la Juventus del técnico Carlo Carcano, que fue campeón de Italia en 1930; la de Giovanni Trapattoni en 1985; y la de Fabio Capello, cuyo título liguero fue revocado por la Federación de Fútbol italiana (FIGC) tras el escándalo de fraude deportivo denominado "Calciopoli".
El equipo que ahora entrena Massimiliano Allegri solo arriesgó en la primera jornada, cuando ganó 3-2 al Chievo Verona en el último minuto. Desde ahí impuso su ley con claridad contra todos sus contrincantes.
Asi, los 'bianconeri' doblegaron con firmeza, y sin realizar particulares gastos de energía, a Lazio (2-0), Parma (2-1), Sassuolo (2-1), Frosinone (2-0), Bolonia (2-0), Nápoles (3-1) y Udinese (2-0).
Lo hicieron empujados por un croata Mario Mandzukic que volvió a marcar con continuidad, tras actuar como delantero centro, y ya no en la banda; y por un Cristiano que ya va adaptándose a los ritmos y a la táctica de la Serie A.
El luso, incorporado este verano procedente del Real Madrid a cambio de 112 millones de euros, tardó cuatro partidos antes de estrenar su cuenta goleadora y, desde entonces, ha ido incrementando de manera constante el nivel de sus prestaciones.
Firmó un doblete ante el Sassuolo y decidió el triunfo contra el Frosinone, además de sentenciar el encuentro del pasado sábado ante el Udinese del técnico español Julio Velázquez.
No obstante, su mejor prestación hasta este momento ha sido registrada en el primer partido "grande" de la temporada, y no marcó: contra el histórico rival Nápoles, Cristiano dio dos asistencias y participó también en el tercer gol, para permitir a la Juventus dar un golpe en la mesa en la Serie A.
En el club turinés están encantados con la actitud mostrada por el portugués, que vino al Juventus para dar un plus a la ya competitiva plantilla en los momentos decisivos, en Italia y, sobre todo, en Europa.
Madurez sin Cristiano
Sin embargo, el conjunto de Allegri dio muestra de una gran madurez también en los días en los que no pudo contar con el astro portugués. De hecho, Cristiano fue expulsado en su debut europeo con el Juventus Turín, en Mestalla contra el Valencia, pero sus compañeros tuvieron la fuerza de aguantar en inferioridad numérica y de doblegar al equipo de Marcelino García Toral (2-0).
Sin el portugués, que salió entre lágrimas por roja directa por un contacto con el colombiano Jeison Murillo, fue el bosnio Miralem Pjanic quien determinó el 2-0 final, gracias a la transformación de dos penas máximas.
Los 'bianconeri' también ganaron con autoridad en el segundo partido europeo del año, aunque contra un rival mucho más modesto. Fue el pasado martes, cuando el argentino Paulo Dybala firmó un triplete para hundir al Young Boys suizo.
Así, la Juventus llega al segundo parón de selecciones de la temporada como una máquina perfecta: sólido en defensa y brillante en la delantera, lo que alimenta las esperanzas del club turinés de vivir una temporada de protagonista especialmente en Europa, su gran sueño.