Examen del más alto nivel

El estadio Michel-d'Ornano de Caen será este lunes el escenario de la despedida de 2018 de la selección española sub-21, un examen del más alto nivel ante Francia en el que ambos equipos tratarán de sacar buena nota ante el próximo Europeo de San Marino e Italia.

Y es que se verán las caras dos conjuntos con las más altas ambiciones en la fase final que tendrá lugar entre el 16 y el 30 de junio del próximo año, dos bloques que hicieron una magnífica fase de clasificación y que acudirán con el cartel de aspirantes a pelear por la corona.

Si España, primero bajo la batuta de Albert Celades y luego con Luis de la Fuente completó una magnífica previa, los "Bleus" realizaron una impresionante fase de clasificación. Sellaron su pase primeros con nueve victorias y un empate, en la última jornada, con todo ganado, ante Eslovenia (1-1), el 16 de octubre, en Dijon.

La selección gala retornará a una fase final de la categoría doce años después. La prueba ante la Roja, actual subcampeona y la segunda selección más laureada en europeos (4), detrás de Italia, servirá para calibrar el estado de forma de una selección criada en el prestigioso centro de formación de Clairefonteine, vivero de la actual selección campeona del mundo en Rusia.

El conjunto que dirige Sylvain Ripoll viene de empatar a dos goles ante Croacia en otro amistoso celebrado el jueves pasado. Cuenta en sus filas con emergentes nombres como el fino medio del Olympique de Lyon, Lucas Tousart; Jonathan Ikoné -uno de los destacados del Lille-; o el poderoso ariete Jean-Philippe Mateta, que acaba de fichar por el Maguncia 05 alemán; sin olvidarse del joven Mattéo Guendouzi, el prometedor futbolista del Arsenal cuyo debut en Beauvais fue esperanzador.

Los 'espoirs' franceses, que tuvieron para estos dos encuentros las bajas de Houssem Aouar y Moussa Dembélé, son un equipo que auna poderío físico, velocidad y calidad individual, que exigirá a España lo mejor de sí misma, tal y como reconoció a Efe Luis de la Fuente.

El técnico llega a este compromiso satisfecho por la evolución del equipo y por el buen partido en Las Gaunas ante Dinamarca, otra selección que estará en el Europeo. La Roja remontó con una destacada actuación y un triplete de Borja Mayoral. No obstante, De la Fuente es consciente de que es obligado mejorar, porque considera que hay margen para ello.

Para el seleccionador no hay amistosos. Todos los partidos de aquí al Europeo son fundamentales para afinar la puesta a punto. Asegura que no dispone de mucho tiempo y es necesario aprovechar cada momento, cada compromiso. Y este encuentro es, en este sentido, trascendental.

Podría hacer el seleccionador algún pequeño retoque dependiendo del estado físico de sus jugadores y de las ligeras molestias de algunos de sus pupilos pero manteniendo la base de los habituales. El céltico Fran Beltrán ya se quedó en casa tras el choque ante Dinamarca por problemas físicos.

Lleva dos meses en el cargo Luis de la Fuente y presenta un balance de cuatro triunfos y una derrota (ante Irlanda del Norte, en partido que no tenía trascendencia clasificatoria), pero sobre todo una adecuada evolución y la irreprochable adaptación al modelo y las formas de los que han ido entrando en el equipo.

El técnico riojano ha hecho debutar a trece jugadores y su rendimiento ha sido óptimo, como el de los más habituales, que tendrán este lunes su prueba, si cabe, más exigente.