Al Athletic EFT se le escapa el título en otra amarga despedida de San Mamés (1-2)
Al Athletic EFT se le ha escapado el título de Liga entre los dedos en otra amarga despedida de San Mamés. Una ajustada derrota a manos del Barça (1-2), que empezaba mandando desde muy pronto exigiendo un gran esfuerzo a las locales, cambiaba el título de dueño.
Las rojiblancas se tienen que conformar con el subcampeonato a pesar del incansable aliento de los miles de aficionados que han presenciado el duelo en La Catedral, un esfuerzo agradecido por las jugadoras con una piña final en el círculo central a pesar del disgusto.
El encuentro no podía empezar de peor manera. Melani, con un preciso saque de falta directa, adelantaba a las catalanas a los tres minutos de juego. Este gol cambiaba el panorama por completo. La presión se trasladaba al bando local. Y a las rojiblancas, ante la majestuosidad de San Mamés, los nervios les jugaron más de una mala pasada.
La imprecisión presidía las combinaciones del equipo de Juanlu Fuentes, al contrario que en el excelente nivel que habían dado a lo largo de toda la temporada. Pero la veterana Eli Ibarra llegaba al rescate justo antes del descanso, con otro libre directo que se colaba en la meta visitante sin que ninguna otra jugadora desviara la trayectoria.
El empate les valía a las bilbaínas, pero el conjunto blaugrana no estaba dispuesto a tirar la toalla. El Athletic, mucho mejor plantado en la segunda mitad, y en los primeros compases de la reanudación acariciaba la sentencia primero en una doble ocasión desbaratada por Rafols y después con un disparo de Eli Ibarra repelido también por la portera catalana.
Las visitantes seguían en el partido. Y Vicky daba un primer aviso que solventaba la zaga bilbaína. El Barça reclamaba un posible penalti. Y, minutos después llegaba el 1-2 que cambiaba de nuevo el dueño del título. Kenti batía a Ainhoa en un mano a mano tras una jugada con buenas dosis de fortuna para las visitantes. Nekane, ya en la recta final, estrellaba un disparo con la zurda en el larguero. El título ponía ya rumbo a Barcelona.
