Ni un ápice de rencor en Gasteiz por el fichaje de Viguera
El Alavés, pese a la ruptura de relaciones anunciada hace alrededor de un año, ha asumido de buen grado el fichaje de Borja Viguera previo pago de la cláusula de rescisión de un millón de euros por parte del Athletic. Una operación pactada con los responsables albiazules, para evitar la hostilidad de una ejecución ajena al club de origen depositando el dinero en la Liga. Parece, por tanto, que las relaciones entre los clubes se van reconduciendo. En Gasteiz, solo hay muestras de gratitud hacia Viguera y ni un ápice de rencor contra él ni contra el club bilbaíno.
El presidente albiazul, Alfonso Fernández de Trocóniz, una vez oficializado el traspaso, reconocía que "es una pena perderle" pero el precio abonado desde Ibaigane supone "una importante inyección económica". Tienen pendiente el último plazo del convenio de acreedores y la necesidad de reforzar su plantilla para evitar los apuros clasificatorios que le mantuvieron con un pié en Segunda B hasta el último minuto de la victoria en Jaén.
La web oficial del club gasteiztarra está plagada de guiños al delantero riojano. Empezando por el mensaje de agradecimiento mutuo, donde recuerdan que con su marcha "deja atrás muchos goles, muchas alegrías y el recuerdo de un gran jugador y de una gran persona". El ahora león les había dejado el siguiente mensaje: “Quiero dar las gracias a todos, a Vitoria, al Deportivo Alavés, a mi compañeros y a la afición, por estos dos años maravillosos en los que me he vuelto a sentir futbolista. He estado muy a gusto, he sentido el cariño de la gente y eso es incluso más importante que lo deportivo. ¡Muchas gracias a todos y Beti Alavés!".
Por último, cabe destacar la puja iniciada para adquirir la camiseta que el pichichi de Segunda, incluido en el once ideal de la Liga Adelante, ha defendido en la recién cerrada campaña. La subasta de la zamarra, firmada por el protagonista, tiene un precio de salida de 50 euros y se mantendrá abierta hasta el próximo 22 de junio.