Gorka Iraizoz

La pregunta es clara y sencilla: “¿se está dando un trato justo a Gorka Iraizoz?”. En mi opinión es igual de clara y sencilla su respuesta, no. Podemos entrar a valorar sus actuaciones en la última fase de la presente temporada tras la lesión de Kepa Arrizabalaga, en la que quizás no ha estado a la altura que se espera de un portero de dilatada experiencia como es su caso. Pero, ¿y que jugador, trabajador o simplemente persona no sufre altibajos en su juego, trabajo o vida?

Como entrenador de porteros y, sobre todo, como socio del Athletic Club que soy, no hay cosa que más odie que se pite a un jugador que defiende el escudo del Athletic. Pongo siempre por encima de actuaciones concretas en determinados partidos la obvia reflexión de que ningún jugador se va a echar piedras sobre su propio tejado haciendo mal las cosas por iniciativa propia.  El puesto de portero es una demarcación muy exigente y específica, además quizás desconocida para la multitud de personas que acuden a un campo de futbol. Es muy sencillo criticar y valorar una jugada en concreto después de haberla visto repetida varias veces en la televisión. Yo hubiera hecho esto, yo hubiera hecho lo otro, pero la verdad es que es el portero quien tiene que decidir en décimas de segundo. Si salir o no o si dar un paso hacia un lado o hacia el otro.  Pongo un ejemplo muy esclarecedor de lo que quiero expresar con estas líneas:
Si preguntásemos a los cerca de 50.000 aficionados que acuden a San Mamés en un partido cualquiera cuanto mide una portería de futbol, me juego un dedo y no lo pierdo, a que tres cuartas partes de los mismos no saben la respuesta. Pues bien, yo y los que amamos este deporte y en concreto esta especialidad del entrenamiento de porteros lo tenemos muy claro… siete con treinta y dos metros de ancho por dos con cuarenta y cuatro metros de alto.  Centrándome en el caso de Gorka, en mi humilde opinión creo que hay varios aspectos que han podido influir en su estado de ánimo y por lo tanto en su nivel de juego. Digo esto porque bajo mi punto de vista su calidad como portero esta fuera de toda duda. ya que tras diez temporadas y cerca de cuatrocientos partidos en la élite del futbol todos los entrenadores que han pasado por el Athletic han apostado por el frente a otros compañeros.   Uno de esos aspectos puede ser ese aspecto intrínseco a la vida, es decir, el paso del tiempo. Me explico. Gorka nunca ha sido un portero que destaque por su velocidad bajo palos o su velocidad de reacción, y este es un aspecto que pese a trabajarlo todos los días en Lezama se va perdiendo muy poco a poco con el paso del tiempo.  
Pero de la misma manera que un portero va viendo mermadas algunas de sus características con el pasar de las temporadas  hay otras que van aumentando y mejorando con el paso de “ese” mismo tiempo. No hay que olvidar que el aspecto más valorado, frente a cualidades físico/técnicas de un portero, es su toma de  decisión. Su capacidad para tomar decisiones acertadas en momentos puntuales y concretos durante un partido. ¿Y cómo se aprende a tomar decisiones acertadas? Decidiendo, aciertes o te equivoques, decidiendo. Cuantas más veces hayas decidido en tu vida mayor será tu capacidad de toma de decisiones acertadas.  Otro punto que no quiero dejar pasar por alto es la situación que el meta de Athletic vivió a pocos días de que comenzara la temporada. Desde el cuerpo técnico del Athletic se le informa de que ya no va a tener el mismo “estatus” que hasta la fecha y que si quería salir tenía las puertas abiertas. ¿A quién de nosotros lo no le afecta una falta de confianza de tal calibre por parte de quienes valoran tu trabajo?  Parece que en Bilbao somos muy dados a alzar a los cielos a jugadores en dos partidos y sobre todo a enterrar a otros que llevan décadas peleando por este escudo que tantas alegrías y sinsabores nos da. Pues bien, yo no soy uno de ellos, reniego de que el Athletic sea un club más, de que nos convirtamos es un club de esos muchos otros en los que los aficionados van a aplaudir o silbar únicamente en referencia a si les gusta la función o no.   Volviendo al principio me reitero en mi respuesta. No.
Por Eneko Suances, By Sport, entrenador de porteros SD Leioa

@enekosuances