Berizzo medita un cambio de sistema
Eduardo Berizzo, técnico del Athletic Club su quinta visita como entrenador al Benito Villamarín. El argentino, que durante su etapa como responsable del Sevilla no tuvo la oportunidad de vivir el derbi de la capital hispalense -fue destituido dos semanas antes- vivió ocho duelos frente al Betis en el banquillo del Celta. El esquema con cinco defensas del conjunto que entrena Quique Setién podría provocar cambios en el dibujo del 'Toto'.
A Berizzo le gusta que su equipo "juegue al fútbol e intente ser protagonistas"; una característica que también valora en el entrenador rival. Quique Setién "es uno de ellos".
"Setien ha logrado que el Betis realice una temporada extraordinaria y compita en Europa con gran mérito de su entrenador"
El de Cruz Alta es consciente de que el Betis, a pesar de su sequía de goles, "tiene sus riesgos, con centrocampistas que se mueven y asocian entre sí" .
"Es un equipo que controla bien el balón, lo mueve con criterio técnico, que se preocupa de la estética de juego y es fiel a sus ideas. Debemos ajustar bien la presión en un clima que nos exigirá sacrificio físico y equipar el partido en lo táctico para poder jugarlo", ha destacado
"Pero creemos que si nos adecuamos tácticamente al partido y presionamos en campo rival, podemos disponer del balón y poner al Betis en condiciones defensivas, que es la fase del juego que no le gusta hacer", ha añadido.
Eduardo Berizzo atiende a la prensa en Lezama.
Berizzo no descarta variar el sistema. "Siempre jugamos con cuatro atrás y ante una defensa de cinco tu dibujo tiene que cambiar"
"Pero las intenciones están por encima del dibujo", ha precisado. Su intención es "presionar con justeza, recuperar la pelota y jugarla con posesiones". "Tenemos que imprimir ritmo muy alto al juego, parecido al último partido en casa; esa intensidad erosiona el sistema rival".
"De principio a fin habrá un clima que nos va a exigir mucho esfuerzo"
Berizzo asume que el partido frente al Real Madrid ha puesto el listón muy alto, "Somos perfectamente conscientes de que la actuación del sábado nos obliga, no nos relaja. Debe exigirnos y ponernos en un nivel que no debemos bajar. Eso ha sido entendido por los futbolistas en el pre-Madrid y en el post-Madrid".